miércoles, 24 de febrero de 2010

"PHIDYLÉ" de HENRI DUPARC

La Ninfa de la Fuente - Lucas Cranach, el viejo - Museo Thyssen Bornemisza - Madrid

El compositor francés Henri Duparc, quien fue calificado por César Franck como «el más dotado de mis discípulos» (suponemos que se refería al ámbito musical), estrenaba en 1889 la mélodie titulada "Phidylé", compuesta años atrás (1882) sobre unos versos de Leconte de Lisle (de sus "Poemas Antiguos").

Se trata de una hermosísima página para voz y piano (aunque entre 1891 y 1892, elaboraría una nueva versión para orquesta) que Duparc dedicó a su colega Ernest Chausson y que he decidido traer hoy al blog.

Duparc consigue mostrar en esta pequeña pieza todo su potencial compositivo en el ámbito de la mélodie, donde fue un auténtico maestro en el arte de unir, con sofisticada elegancia, música y poesía, mostrando una innata capacidad para extraer la atmósfera y el sentimiento del poema, y conseguir transmitirlo a través de la música.

Desafortunadamente para nosotros su producción fue muy pequeña (apenas 17 mélodies), sin embargo se puede afirmar que Duparc es el compositor que dota definitivamente a la mélodie francesa de un carácter propio, donde la música deja de ser un mero acompañante de la voz para convertirse en un intérprete más del sentido del texto poético.

"Phidylé" es una pieza llena de pasión, ternura, melancolía y sensibilidad, en la que nos describe, con una belleza estremecedora, toda la serenidad de un cuadro pastoral donde la placidez de la naturaleza acoge el sueño de la amada, evolucionando musicalmente hacia un clímax final, lleno de colorido, en el que el despertar de aquélla no es más que el simbólico despertar al amor.

A continuación podemos escuchar "Phydilé" en su versión orquestada e interpretada por la genial mezzosoprano Janet Baker:


video de MrRobuso

L’herbe est molle au sommeil sous les frais peupliers,
aux pentes des sources moussues,
qui dans les prés en fleur germant par mille issues,
se perdent sous les noirs halliers.

Repose, o Phidylé!. Midi sur les feuillages
rayonne et t’invite au sommeil.
Par le trèfle et le thym, seules, en plein soleil,
chantent les abeilles volages.

Un chaud parfum circule au détour des sentiers,
la rouge fleur des blés s’incline,
et les oiseaux, rasant de l’aile la coline,
cherchent l’ombre des églantiers.

Mais, quand l’astre incliné sur sa courbe éclatante,
verra ses ardeurs s’apaiser,
que ton plus beau sourire et ton meilleur baiser
me récompensent de l’attente!

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La hierba está blanda y duerme bajo los álamos frescos
en las pendientes de fuentes musgosas
que, en las praderas en flor, brotan en mil riachuelos
y se pierden bajo oscuros matorrales.

Reposa, ¡oh, Phidyle!. El sol de mediodía sobre el follaje
resplandece y te invita al sueño.
Entre el trébol y el tomillo sólo las abejas, a pleno sol,
cantan y revolotean.

Un cálido perfume se propaga a través de los senderos,
la roja flor del trigal se inclina,
y los pájaros, rozando con sus alas la colina,
buscan la sombra de los rosales silvestres.

Pero, cuando el astro inclinado sobre su curva resplandeciente,
vea apaciguarse sus ardores,
¡que tu más bella sonrisa y tu mejor beso
me recompensen la espera!

9 comentarios:

  1. Confieso que me pierdo con esta pieza, no soy capaz de seguir el hilo.

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  2. Pero hombre, Imperator, usted que no se pierde ni con Edgar Varèse ni con Feldman (Morton, no Marty), ¿cómo me puede decir que se pierde con el pobre Duparc?... ja, ja...
    De todas formas, para no perderse con estos franceses lo mejor es ir dejando miguitas de foie de canard...

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  3. Con los franceses me suelo perder. Debussy, por ejemplo, intuyo que me gusta, pero en realidad no tengo ni idea porque cuando lo escucho estoy más perdido que Andy y Lucas en una biblioteca. No soy un purista afrancesado como tú, por eso a mí Helga me quiere.

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  4. Pues si quieres seguir ganando puntos con ella no olvides que hoy es San Justo...

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  5. A mí me ha encantado esta Phidylé. Me parece una composición de una sensibilidad enorme y me gusta mucho esa explosión final.
    También es verdad que he ido tirando escargots para no perderme, je,je,je.

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  6. Atticus, bonjour.
    Vraiment délicieux, avec ou sans foie gras de canard qui nous guide.

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  7. Atticus:
    Yo soy muy amante de las chansons pero coincido con Titus: Te piertes en éllas como si el compositor hubiera decidido diversos inicios de una melodía que nunca deja terminada. Así que, hace años, asumí que tomaría estas canciones tal y como me vinieran, como ráfagas de música cercanas al susurro y a una intimidad que no exige coherencias convencionales. No hay ritornello. Pues bueno.
    Agradecida por el post.

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  8. Toujours avec foie, Joaquim, tojours avec foie.
    Et je vois que vous êtes un "puriste gabachois" comme moi, mon ami... Oh, la, la...

    Gloria: Tienes toda la razón. Esta música lo único que pide es eso, dejarse llevar y sentirse arrullado por la belleza melódica.

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  9. Pues de la advertencia de Brangäne a esto no hay más que un paso.

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