jueves, 6 de octubre de 2011

BELLINI, "I PURITANI" Y UNA CANCIÓN PERDIDA

"Oliver Cromwell y su secretario John Milton" - Charles West Cope - 1872

En 1833, el compositor siciliano Vincenzo Bellini se traslada a París con el propósito de lograr una definitiva repercusión internacional para su producción operística, que ya gozaba de un importante prestigio en Italia y en Inglaterra. En la capital francesa, auténtico centro europeo de las artes en aquella época,  contó con la inestimable ayuda de Gioachino Rossini, quien le introdujo en los círculos musicales parisinos, consiguiendo que se representasen en el Théâtre-Italien de la ciudad las óperas “I Capuleti e i Montecchi” y “Il Pirata”, las cuales alcanzaron un éxito notable y posibilitaron que se encargase a Bellini que escribiese una nueva obra para ser estrenada en dicho teatro.

En el verano de 1834, Bellini comienza a componer en París la que a la postre sería su última ópera, “I Puritani”, contando para ello con la colaboración del poeta y Conde boloñés Carlo Pepoli, inexperto libretista, que fue quien se encargó de los textos. La relación entre ambos no fue especialmente fluida, quejándose a menudo Bellini de la complicada escritura de Pepoli y de su ausencia de pasión y fuerza dramática, insistiéndole en que el objetivo de la ópera era “hacer llorar, temblar y morir al espectador a través del canto”. Sea como fuere, tras múltiples correcciones se obtuvo un resultado que parece que no acabó de desagradar al compositor.

Finalmente “I Puritani” se estrenaría en el Théâtre-Italien de la capital francesa en enero de 1835, con un reparto de campanillas en el que destacaban la reputada soprano Giulia Grisi y el famosísimo tenor Rubini. La obra obtuvo un enorme éxito y Bellini alcanzó en Francia la fama que ansiaba, llegando incluso a ser condecorado con la Legión de Honor. Muchos eran los proyectos que se vislumbraban en el horizonte del siciliano, pero para su desgracia, apenas 8 meses después del estreno de “I Puritani”, el compositor fallecería en el suburbio parisino de Puteaux debido a una infección intestinal cuando tan sólo contaba 33 años de edad.

“I Puritani” siempre me ha parecido una auténtica maravilla. Cuenta con una escritura orquestal rica y brillante y está plagada de melodías inspiradísimas. Entre ellas, como toda ópera de la época que se preciase, contiene su correspondiente escena de la locura, en la que suena la preciosa aria “Qui la voce sua soave”.

La música de este fragmento en realidad no era original, sino que fue reciclada por el compositor de una canción que había escrito pocos meses antes en París, en la que puso música a unos sonetos precisamente del Conde Carlo Pepoli. La canción en cuestión se tituló La Ricordanza y parece que formaba parte de un grupo de cuatro, compuestas sobre otros tantos sonetos de Pepoli, que permanecieron perdidas durante mucho tiempo y de las cuales tan sólo se ha recuperado ésta, al ser encontrado su manuscrito en la Biblioteca del Congreso de Washington, siendo publicada por primera vez en una fecha tan reciente como 1974.

Bueno, ahora es cuando en el blog toca escuchar algunos ejemplos sonoros de aquello de lo que se ha hablado, con las versiones que considere más apropiadas o más me gusten de entre las que se puedan encontrar disponibles por la red. Pero como la crisis aprieta, la cosa va a cambiar un poco. No puede seguir permitiéndose este blog, en la situación actual, seguir trayendo a los mejores cantantes y orquestas, con desorbitados cachés, así que, adaptándonos a las circunstancias, procuraremos contentarnos esta vez con unas versiones más modestas.

En primer lugar escucharemos la canción “La Ricordanza”, de Bellini, en la sentida interpretación que nos ofrece Kenneth Kamal Scott, acompañado al piano por Gerald A. Brown. He investigado un poco sobre este cantante, muy apreciado en el mundillo de Broadway,  y, a pesar de los indicios, nada apunta a que haya sido acusado oficialmente de tragarse al Pato Donald y que sea a éste a quien realmente se escuche en la grabación. Os aseguro también, tras una ardua labor de traducción, que Mr. Nariz canta en italiano:


video de kamalscott1

Ahora vamos a escuchar el reciclaje que hizo Bellini de esa canción en el aria de “I Puritani” “Qui la voce sua soave”. Si le ponemos un poco de voluntad podremos apreciar la similitud entre este fragmento y la canción que escuchamos antes. La interpretación, o lo que sea, corre a cargo de una muchacha llamada Seungah Shin, acompañada al piano de un misterioso sujeto que no se da a conocer, supongo que para evitar represalias. El que ha subido el video se hace llamar My God, y esto sí imagino por qué. Bueno pues aquí está “Qui la voce sua soave” seguida de la cabaletta “Vien diletto”:


video de mygod0606

No puedo acabar sin subir un poco el nivel, así que vamos de nuevo con “Qui la voce sua soave… Vien diletto”, esta vez en la interpretación de una cantante llamada Lina Privitera. Yo también pensaba al principio que se trataba del zaguero de la selección galesa de rugby con peluca, pero no, es una soprano auténtica. La acompaña al piano Dario Virgillito:


video de stefanofnc12

La verdad es que esto no puede quedar así, que le den morcilla a la crisis, y, al menos desde este blog, en cultura no se va a recortar. Así que vamos a escuchar ahora de verdad la canción “La Ricordanza” de Bellini interpretada por el tenor estadounidense Lawrence Brownlee acompañado al piano por Martin Katz:


video de MrRobuso

Y, para finalizar, os dejo con el aria y cabaletta "Qui la voce sua soave... Vien diletto", de "I Puritani" de Bellini, en la estupenda interpretación de la soprano Mariella Devia:


video de Gobrias

6 comentarios:

  1. Atticus,
    Una magnífica y pedagógica entrada. Extraordinários los dos últimos vídeos (entre el pato Donald, la chinita y el zaguero de rugby galés ya estaba poniéndome nervioso). I Puritani es una de mis òperas preferidas de siempre por su musicalidad y harmonia (aunqué algunos lo confundan con ñoñez y sensibleria) y por supuesto la mejor orquestada y más completa en todos los aspectos, de las que compuso Bellini.
    Un abrazo

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  2. Gracias por haber aguantado hasta el final, josep. Los 3 primeros videos eran como para salir por piernas.
    Pero al final había premio.
    Yo también comparto tu opinión sobre Puritani.
    Un saludo.

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  3. Menos mal que estaban los últimos dos vídeos, tras ver los primeros estaba por pedir a los cascos azules que ocuparan tu blog. O a Álvarez Cascos, que da más miedo.

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  4. Puritani es una completa delicia, inspiración a raudales y belleza en estado puro. Es lo más logrado de su autor y la más clara muestra de lo mejor que ha dado de sí la época dorada del género lírico.
    Pero claro, para gente como monsieur Mortier se trata de algo "menor". Menos mal que no todo el mundo es tan ignorante y "Puritani" está programada para diciembre en Murcia con Celso Albelo, que es algo mejor que el "pato Donald" Kamals.

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  5. Hola, me podrían indicar por qué en el final del ária Credease misera! en unas versiones cantan soprano y tenor y en otras solo tenor? Gracias.

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  6. Cuando el tenor canta Credeasi misera en la ópera se unen las voces de la soprano, los personajes de Giorgio, Riccardo y Elvira y del coro. Si has escuchado una versión donde sólo aparece la voz de tenor, será posiblemente porque se trate de una actuación en un recital.

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