lunes, 11 de noviembre de 2013

"LA TRAVIATA" CON SONYA YONCHEVA

Finalmente, ayer 10 de noviembre, en la sexta función de las siete previstas de "La Traviata", de Giuseppe Verdi, que se está representando en el Palau de les Arts de Valencia, pudimos tener a la pareja de cantantes que se anunció en su momento que iba a protagonizar todas las representaciones.

Luego vinieron cancelaciones, cambios sin previo aviso, sustituciones en plena función, anuncios de nuevos cantantes que no llegan a venir… Sólo en el papel de Alfredo, tras seis representaciones, han pasado ya por los carteles o el escenario de esta Traviata, otros tantos tenores (el anunciado cuando se dio el avance de la temporada, Stefan Pop, que ni llegó a aparecer; Ivan Magrì que oficialmente iba a protagonizar todas las funciones, pero cantó el primer acto y el aria y cabaletta del segundo el día del estreno y se retiró por lesión en plena función; Nikolai Schukoff, que cantó desde un atril en el proscenio lo que restaba de Traviata en el estreno; Aquiles Machado, que fue anunciado para el 24 de octubre, pero luego cantó también la del 29; Saimir Pirgu, que teóricamente iba a cantar las funciones del 29 de octubre y 2 de noviembre, pero no llegó a venir; e Ismael Jordi que protagonizó las representaciones del 2 y 7 de noviembre).

Pues, como decía, anoche por fin pudo verse en escena a la pareja inicialmente prevista: Ivan Magrì como Alfredo y la búlgara Sonya Yoncheva como Violetta. Sólo voy a comentar aquí brevemente mis impresiones sobre estos dos cantantes, ya que acerca de la escena, orquesta y resto de intérpretes, me remito a mis anteriores crónicas que podéis ver aquí y aquí, no variando anoche nada sustancialmente respecto a lo que ya dije entonces, destacando una Orquesta de la Comunitat Valenciana sobresaliente bajo la dirección de un Zubin Mehta al que muy pronto empezaremos a echar de menos.

De Ivan Magri ya dije, con ocasión del accidentado estreno, que sus descoordinaciones con el foso fueron numerosas y que yo considero que no es el papel más adecuado para él, pero que debería juzgársele cuando cantase en condiciones. Bueno, pues ayer se supone que lo hizo y mi valoración no puede ser buena. En la parte positiva hay que reseñar su entrega y valentía, afrontando con arrojo las partes más exigentes de la partitura y subiendo sin temor a los extremos más agudos de la tesitura.

Pero su ingrato timbre metálico y unas enormes carencias técnicas, así como una reiterada tendencia a la desafinación y los numerosos fallos en sus entradas perdiendo a la orquesta (pese a no quitar ojo del maestro Mehta), dieron como resultado una actuación en general deficiente, que culminó agotado, perdiendo la impostación y no dando ni una nota en su sitio en un “Parigi o cara” de huir. Como actor se mostró también muy limitado, no sé si debido a su lesión, pero lo cierto es que tuvo menos movilidad y expresividad que un clik de Famobil. En algún momento llegué a pensar que los achuchones y meneos que le daba la Yoncheva en escena iban encaminados a ver si se le reproducía la lesión cervical y le cambiaban el galán para la última función.

Y es que ese paupérrimo Alfredo fue una auténtica lástima después de haber escuchado a unos estupendos Schukoff, Machado, o Ismael Jordi (de este último lo digo por referencias, ya que no pude asistir personalmente a ninguna de sus dos funciones), y sobre todo teniendo junto a él a un pedazo de Violetta como fue Sonya Yoncheva.

La verdad es que tras las magníficas prestaciones que ofreció los días anteriores la joven siciliana Jessica Nuccio, era unánime la sensación de que mucho iba a tener que esforzarse la Yoncheva para hacernos olvidar a aquélla. Pero, aunque sé que habrá opiniones para todos los gustos, conmigo lo consiguió enseguida. Y no sólo porque sea un bellezón.

Personalmente, su voz me cautivó. Es fresca, grande, de enorme volumen y proyección, muy homogénea, con un centro rico y denso, y unos agudos redondos y luminosos. Hizo gala de un buen control de la respiración que le permite hilvanar un fraseo ligado e intencionado. Su fuerza dramática es arrolladora y su actuación escénica conmovedora e impactante, pese al escaso tiempo que habrá tenido para ensayar.

En el aria y cabaletta del primer acto se le vio más justita, pero sin llegar a patinar en ningún momento. Sus dos siguientes actos, especialmente el segundo, fueron de una intensidad dramática desbordante, llevando a cabo un dúo con Germont sensacional y culminando con un “Amami, Alfredo” muy emocionante.


video de MrRobuso

Es verdad que, aunque sí reguló intensidades y se marcó un “Alfredo, Alfredo di questo core” notable, se echa en falta una mayor capacidad de matización que jugase con filados y pianísimos, pero domar ese pedazo de voz no debe ser tarea sencilla. No obstante, a mi juicio, es una extraordinaria Violetta, a la que me voy a quedar con las ganas de ver en escena con un Alfredo que pudiera estar mínimamente a la altura.

El público, que llenaba la sala principal de Les Arts por completo, estuvo muy frío toda la noche, gélido. Parece que costaba iniciar cada aplauso. Incluso al final de la cabaletta del tenor en el segundo acto, ante el silencio del respetable el maestro Mehta se volvió hacia los presentes y dijo: “Bravo, ¿no?”, comenzando entonces una tibia ovación. Eso sí, al finalizar la representación la catarata de bravos a Sonya Yoncheva y a la orquesta fue espectacular.

Bueno, pues ya sólo queda una representación, el próximo miércoles 13, de esta accidentada Traviata. Yo aconsejaría, a quien pueda acudir, que se acercase a la venta de última hora para conseguir entrada y escuchar en directo a Sonya Yoncheva. Además, igual, con un poco de suerte, hasta cancela Magrì.
 

11 comentarios:

  1. Más que dignas las celebraciones de los bicentenarios. Esperemos que no sea la última temporada del maestro Mehta. Me da la impresión de que sin él el invento se nos viene abajo.

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    1. Opino como tú, Kiko, pero todo apunta a que va a costar mucho que Mehta vuelva por aquí.

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  2. Yo disfruté mucho, me sorprendió (muy gratamente) la escena y la soprano me pareció magnífica. El Addio del passato me dejó catatónico. También me impactó el inicio del último acto: preludio con todos los invitados en escena retirándose y dejando sola a Violetta, absolutamente conmovedor.

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    1. Creo que esta puesta en escena, con sus pegas que las tiene, es más que interesante, y las dos sopranos que hemos tenido, un acierto.

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  3. Pepa Marqués Regolf12/11/13 02:07

    Por fin ayer estuve en Les Arts ,Tenia una pequeña esperanza de escuchar A. Machado pero como muy bien habeis dicho ya estaba restablecida la pareja inicial. Atticus coincido plenamente con vuestras opiniones. Sonya Yoncheva me gusto muchísimo su preciosa voz y me conmovió su interpretación. Magrí me pareció muy flojo y mi comentarió en el primer descanso fue " no está repuesto del todo". De todas forman ya lo había escuchado en Rigoleto y sin estar mal no me pareció extraordinario.La orquesta y Mehta fabulosos y espero que lo sigan siendo .

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    1. A mí, Magrì no me gusta como Alfredo. La calidad de Machado está a años luz.
      Lo de Mehta y la orquesta es un lujo. Esperemos que la marcha del maestro y la caótica situación del teatro no pulverice este activo cultural que tenemos el privilegio de poder escuchar.

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  4. Magrì fue el garbanzo negro y Yoncheva (espectacular) me recordó en algunos momentos a Netrebko, pero con algo menos de fiato. Con Machado de Alfredo hubiera sido una función muy redonda.

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    1. Magrì estuvo muy desafortunado, pese a su valentía. Muy lejos de la calidad que merecía una soprano como esta, pese a las críticas de algunos.

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  5. Yo estuve en las dos funciones ultimas, y sencillamente ella ( a la que no pude oir en el dia del estreno ) estuvo maravillosa, lastima no haber ido tambien el dia 7.
    El no me convencio y como hubiese sido completo si el papel de Alfredo lo hubiese hecho Machado.

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  6. Hola Atticus:
    Cuanto tiempo sin escribir en tu blog, en fin, circunstancias de la vida.
    Estuve el día 7 en la representación de La Traviata. La soprano Sonia Yoncheva me pareció maravillosa. Actoralmente estuvo fantástica y tiene una voz muy cálida y con mucho volumen. Lo agradecí porque desde el 4º piso a veces no se oyen bien a los cantantes. Ya me gustaría a mi ir a platea... Quizás soy una paleta y la acústica debe ser igual en platea que arriba, pero mis oidos dicen que nones. En cuanto a Ismael Jordi, no me desagradó, pero a mi modo de ver, que puedo estar equivocada (solo soy una aficionada) le faltó volumen, la soprano creo que tuvo que bajar su volumen en los duettos porque sino sólo se la oía a ella. Vamos, que se lo comía con patatas... Eso sí, creo que Jordi llegó a todas las notas y no aprecié que se equivocara en ningún momento (a parte que tiene un físico majete, vamos, que quedó muy bien sin pantalones, je,je). Sinceramente, me hubiese encantado ver a Sonia Yoncheva y a Machado, pero bueno, creo que me tocó un buen día (la ópera en el Palau de les Arts es como jugar a la lotería, no sabes lo que te va a tocar y si te va a tocar algo, a este paso...).
    En cuanto al barítono Simone Piazzola, creo que se llama así, estuvo bien, sobre todo en las réplicas a Sonia, pero a mi personalmente no me entusiasma su voz, no me resulta agradable al oido. En fin, para gustos colores.
    Bueno, yo me lo pasé pipa. LLoré como una magdalena, y salí feliz (así somos de contradictorios los humanos). Espero El Caballero de la Rosa con Metha como agua de mayo. Ojala.

    Un abrazo y decirte que aunque no escriba ni pueda ir a todas las óperas del Palau como antes, me encanta leer tus crónicas, me lo paso muy bien y en parte me siento como si fuera a las representaciones. Así que muchas gracias!

    Doretta.
    Doretta

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    1. Bienvenida de nuevo, Doretta, aquí tienes este blog para dejar tus comentarios siempre que quieras.
      Tengo que decirte que, desde mi humilde punto de vista, o de oído en este caso, la mejor acústica de conjunto en la sala principal de Les Arts se tiene en el 4º piso. Mejor que en platea.
      Lo del Caballero de la Rosa lo veo muy complicado. Si va a cerrar el teatro desde junio a septiembre, no creo que haya Festival del Mediterrani. Ojalá me equivoque porque es una de mis óperas favoritas y además eso supondría que volvería el maestro Mehta.
      Gracias por compartir tus impresiones.

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