miércoles, 9 de junio de 2021

EL COR DE LA GENERALITAT EN HUELGA

Esta mañana se ha confirmado oficialmente la noticia que en los últimos días circulaba como un insistente rumor en el ambiente musical valenciano: el Cor de la Generalitat ha convocado huelga para los próximos días 19 de junio y 1, 2, 16, 21 y 29 de julio, en protesta ante la falta de respuesta, por parte del Instituto Valenciano de Cultura y la Generalitat, a sus reivindicaciones, con las que únicamente pretenden garantizar su supervivencia y asegurar la estabilidad de toda la plantilla, poniendo fin a la situación de temporalidad, impuesta por la administración, que viven desde hace treinta años. Estos paros se unen al ya anunciado para el 18 de junio, día en el que secundarán la convocatoria de huelga general de los trabajadores públicos del Estado contra el abuso de la temporalidad por las administraciones públicas.

Así, los paros convocados afectarán a las siguientes representaciones programadas en el Palau de Les Arts: las dos funciones previstas (18 y 19 de junio) de la Novena Sinfonía de Beethoven con la Orquestra de la Comunitat Valenciana dirigida por Manfred Honeck (tras la cancelación anunciada de Fabio Luisi por motivos personales); y a las dos funciones (1 y 2 de julio) del Réquiem de Verdi, también con la Orquestra de la Comunitat Valenciana esta vez bajo la dirección de Daniele Gatti. Además, afectan a las actuaciones del Cor los días 16, 21 y 29 de julio en las localidades de Morella, Montserrat y Peñíscola.

Como aficionado, siento muchísimo verme privado de disfrutar de estas últimas funciones de la temporada, especialmente de ese Réquiem con Gatti que esperaba yo con enorme ilusión, tras haberse visto frustrado ya el año pasado por la pandemia (la viral, no la administrativa). Pero, precisamente como aficionado, mi interés primordial es que se garantice la supervivencia del Cor de la Generalitat, esta institución cultural capital que tenemos en nuestra Comunidad, pese a que nuestros gestores devoradores de canapés parezca que sigan sin ser conscientes de ello.

Sabéis que en numerosas ocasiones he hablado aquí de la situación que vive el Cor de la Generalitat y me he manifestado claramente, así que poco más tengo que decir. Es impresentable que después de que haya sido la administración autonómica quien haya incumplido la legalidad durante treinta años, manteniendo a unos trabajadores, contra su voluntad, en una posición de inestabilidad laboral absolutamente irregular, se pretenda ahora que sean esos mismos trabajadores que han venido padeciendo la ilegalidad, quienes vuelvan soportar la carga cuando se quiere legalizar la situación, poniendo en peligro sus puestos de trabajo y obligándoles a que pasen unas pruebas que ya superaron en su día. Se ve que ahora hay que demostrar a esos administrativistas de manguitos y politiquillos de cafetín que no distinguen un aria de ópera del maullido de un gato castrado, que los miembros del Cor de la Generalitat están capacitados para mantener los empleos que desempeñan desde hace tres décadas con el unánime reconocimiento internacional. Realmente parece un chiste si no fuera tan grave el problema.

Vaya pues desde este humilde blog todo mi apoyo para estos trabajadores ejemplares que, pese a la injusta situación que vienen viviendo desde hace tantos años, siempre han estado ahí desempeñando su trabajo con excelencia, ofreciendo lo mejor de sí mismos y consiguiendo que los espectadores valencianos podamos disfrutar de uno de los mejores coros de ópera del mundo. Hoy, a nosotros sólo nos cabe estar a su lado y mostrarles nuestra solidaridad, deseando que, por una vez en la vida, se imponga el sentido común y sean atendidas sus justas reivindicaciones. Que así sea, por el bien de ellos y por el nuestro.

A continuación reproduzco íntegramente la nota de prensa que me han hecho llegar los miembros del Cor:

“El Cor de la Generalitat se ha construido a lo largo de más de 30 años de existencia y de trabajo en equipo de todos sus integrantes y esto lo ha llevado a ser considerado por el público y la crítica como uno de los mejores del mundo en su género, tanto por sus prestaciones vocales y experiencia musical, como por su calidad escénica, convirtiéndose en una pieza clave del Palau de les Arts. Los integrantes del Coro no podemos evitar sentirnos emocionados y agradecidos con el enorme y continuo reconocimiento del público, de los críticos y de los directores y músicos junto a los que hemos trabajado y trabajamos, y orgullosos de nuestros logros, que son logros para toda la sociedad. Los gestores culturales no parecen sentir nada de esto (o no les importa) y ponen en riesgo este patrimonio artístico de toda la ciudadanía de la Comunidad Valenciana.

La totalidad de sus cantantes han sido seleccionados mediante rigurosos procesos selectivos públicos realizados a lo largo de sus más de 30 años de historia e integran su plantilla de forma continuada por 15, 20, 25 e incluso más de 30 años. Sin embargo la administración sigue considerando a toda la plantilla como trabajadores "temporales". En realidad, trabajadores que se encuentran en "fraude de ley" por abuso de la contratación temporal desde hace muchos años según la normativa local y también de acuerdo a la normativa europea, ya que la situación choca frontalmente con la Directiva 1999/70 del Consejo Europeo.

Los cantantes del Cor llevan años reclamando a la administración la estabilidad en sus puestos de trabajo, sin ninguna solución por parte de los responsables. Todo lo contrario: la dirección del Instituto Valenciano de Cultura planea la renovación de la totalidad de la plantilla en solo dos años y pone a esta agrupación musical al borde de su desintegración tal y como la conocemos hoy en día, peligrando la continuidad de su actual plantilla e integrantes, la calidad artística que hoy alcanza el Coro y el equipo que se ha ido construyendo en décadas de trabajo conjunto. Desde el punto de vista artístico esto es un despropósito, ya que un coro no es la suma de un cierto número de cantantes, sino un equipo completo y complejo, donde cada cantante se complementa y sabe -ha aprendido- brindarse, fundirse y amalgamarse con los demás en pos del resultado grupal. Solo una renovación paulatina garantiza el mantenimiento del altísimo nivel al que ha llegado la agrupación artística después de mucho tiempo de trabajo conjunto, con mucho cariño y mucho esfuerzo.

Por otra parte, este plan incumple las promesas y acuerdos alcanzados, incluso el compromiso del Conseller Vicent Marzà para una renovación paulatina de la plantilla, expresado ya hace tres años cuando se reunió con nosotros y públicamente en entrevista concedida a la Cadena Ser el 25 de julio de 2018.

La singularidad de nuestra formación como unidad artística consolidada, la calidad alcanzada en cada presentación -indiscutible frente a las ovaciones habituales que recibimos, a las críticas de los medios especializados que leemos, a los elogios de los directores internacionales que nos visitan- deberían ser argumento suficiente para proteger a la agrupación frente a cuestiones de carácter administrativo que, estamos convencidos, tienen mecanismos y vías de solución. Sin embargo, no parece que preservar la calidad artística importe y hasta el día de hoy (aparte de recibir elogios, felicitaciones y buenas palabras) no hemos visto ningún hecho concreto que nos manifieste interés real por parte de la Generalitat Valenciana.

No nos queda más remedio que acudir a la huelga.”

8 comentarios:

  1. Anónimo9/6/21 21:48

    No entiendo nada. Si ya hicieron las pruebas selectivas con publicidad y libre concurrencia hace tantos años no entiendo por qué no los contrataron fijos desde el primer día. Debieron haber reclamado entonces.

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    1. Hemos reclamado muchas veces para que se hicieran esas oposiciones de consolidación tal como marca la ley,es decir dentro del periodo de tres años y jamás la administración atendió a nuestras reivindicaciones y resulta que ahora y después de más de treinta años quieren que volvamos a pasar una oposición.

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    2. Gracias por la aclaración. Es decir, aquellas pruebas de hace años no eran para ser contratados fijos. Ahora van a convocar las pruebas, después de tanto tiempo, para contratar a los cantantes como fijos, pero el Coro no quiere someterse a una oposición. Está más claro aunque sigo sin entender como llegarán a ser fijos sin hacer las pruebas y que sea legal.

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    3. Pues está bien claro. Si usted pasa unas pruebas para ser trabajador de una administración pública y la administración pública se pasa por el forro los derechos laborales de los trabajadores que aún siendo "temporales" han ejercido su función como personal fijo, la misma administración no les puede volver a exigir que demuestren su capacitación para un puesto que llevan desempeñando de manera ejemplar y excelente durante 30 años. En una empresa privada eso es impensable, el trabajador pasa a ser considerado fijo y la empresa sancionada.

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    4. Pues si está tan claro y si la Administración ha incumplido durante tantos años los derechos laborales, lo que tendrían que haber hecho los miembros del Coro es demandarla y que lo hubiera resuelto un juez. Ahora ya estaría todo claro y solucionado. En cambio, todas las temporadas estamos igual con el mismo conflicto que no le hace bien a nadie.

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  2. Todo mi apoyo a los que hace unos meses eran mis compañe@s! No os merecéis esta mala gestión! No os merecéis tanto despropósito! Seguir unidos en la lucha! Mucha fuerza y mucho ánimo!

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  3. Uf!!! Si la cosa es así de complicada parece que va pa largo. Si yo fuera Iglesias programaría para la temporada que viene óperas que no necesitan coro o que sea muy reducido. De esta manera el Palau de les Arts podría contratar a los cantantes que le hicieran falta cada vez. El Cor de la Generalitat al fin y al cabo no és del Palau sino del Instituto Valenciano de Cultura y no hay obligación de que cante allí. Perderemos mucho como espectadores pero si lo que hemos de perder es el espectáculo y la fe y frustrar ilusiones ya no sé si vale la pena. Prefiero asumir la programación que sea pero después poder verla sin estar leyendo el periódico o internet dos semanas antes para saber si tengo que ir o no.


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    1. Pues, si yo fuera Iglesias haría todo lo que estuviera en mis manos bien para que la administración y/o los políticos arreglaran esto ya mismo y tener un coro estabilizado, bien para que el coro pasara a depender del Palau y tener un coro estable.

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