miércoles, 25 de febrero de 2009

ESPERANDO A "I CAPULETI E I MONTECCHI"


Estos días sale a la venta en Europa el doble CD de la Deutsche Grammophon de la ópera de Bellini "I Capuleti e i Montecchi", interpretada por Anna Netrebko y Elina Garanca, junto a Joseph Calleja y la Sinfónica de Viena, dirigidos por Fabio Luisi, en la grabación en directo que tuvo lugar hace casi ya un año en el Konzerthaus de la capital austriaca.

Mientras aguardo su distribución en España (veremos cuando), continúo impaciente ante mi programada visita al Royal Opera House de Londres, el 7 de marzo, para asistir a la representación de esta ópera de Bellini que se estrena el próximo día 2, con la misma pareja protagonista, en una producción con dirección escénica de Pier Luigi Pizzi, en lo que constituye la cuarta reposición del montaje original de 1984.

No soy especialmente belcantista, y, dentro de la obra de Bellini, "I Capuleti e i Montecchi" no es tampoco, a mi juicio, una de sus mejores obras. Tiene momentos bellísimos, eso sí, pero carece de la redondez de conjunto que puede predicarse de "Norma" o "I Puritani". No obstante, siempre es un placer poder asistir a las representaciones del ROH, y en esta ocasión cuento con el aliciente añadido de ser la primera vez que pueda ver y escuchar en directo tanto a Anna Netrebko como a Elina Garanca.

Garanca ya se estrenó en el rol de Romeo, en su Riga natal, hace un año en versión concierto, papel que volvió a repetir, precisamente junto a la Netrebko, el año pasado en Viena, cuando se grabó el CD de la Deutsche Grammophon.

Vamos a escuchar hoy en el papel de Romeo a Joyce DiDonato, cantando el aria "Ascolta…Se Romeo t’uccise":


video de Quetzalcom

Anna Netrebko ha interpretado en diversas ocasiones el papel de Julieta, la última el año pasado en la Opéra Bastille de París junto a Joyce DiDonato, representación a la que pertenecía el video anterior.

Hoy traigo una versión de la famosa aria de Julieta "Oh Quante Volte" en la voz de Natalie Dessay:


video de pimidup

Junto a ellas, como ya comente, estará el tenor argentino Darío Schmunck en el papel de Tebaldo y tendrá que lidiar con el aria ‘E serbato a questo acciaro’, de indudable dificultad pese a su aparente sencillez, que requiere una máxima exigencia para poder afrontarla sin perder la elegancia del fraseo, jugando con las intensidades sin dañar la homogeneidad del conjunto y atacando el agudo con seguridad. Lo poco que he podido escuchar del argentino me anima a pensar que saldrá con éxito de la empresa.

Aquí dejo dos interpretaciones del aria citada en dos voces prodigiosas, las de Juan Diego Flórez y Luciano Pavarotti.



video de rexeterna



video de midas45



lunes, 23 de febrero de 2009

Y EL OSCAR FUE PARA...


Pues al final el Oscar fue para A.R.Rahman.

Tal y como se esperaba, el indio se llevó la estatuilla por su composición para la película “Slumdog Millionaire”, que fue la gran triunfadora de la noche con ocho premios, entre ellos los de mejor película, mejor director (Danny Boyle), mejor guión adaptado y mejor canción por “Jai Ho”.




Thomas Newman se fue de nuevo a casa de vacío en su novena nominación sin premio, así como James Newton Howard, Alexandre Desplat y Danny Elfman que habían firmado tres espléndidos trabajos que vuelven a quedar sin recompensa.

Todos aquellos a los que nos gusta el cine sabemos positivamente la escasa garantía de calidad que son estos premios de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas norteamericana, a pesar de su tremendo impacto comercial y mediático. Incluso los que alguna vez nos hemos quedado sin dormir para asistir a esas largas y tediosas ceremonias, sabemos que además de luchar contra el sueño y el aburrimiento, tendremos que sobrellevar al final el enfado por las flagrantes injusticias que se cometen año tras año desde sus comienzos. Sólo hay que recordar ciertos nombres que jamás han recibido el muñecajo dorado para darnos cuenta del latrocinio: Hitchcock, Lubitsch, Chaplin, Hawks, Kubrick, Lumet, Altman

No obstante, muy de vez en cuando, los académicos se ve que se toman algún dry martini de más, y nos sorprenden premiando a quien realmente se lo merece.

Este año no ha habido muchas sorpresas dentro de un nivel no muy alto. El Oscar al mejor actor para Sean Penn quizás haya sido la chispa de la noche, cuando todos daban por hecho que el premio iría a parar a esa especie de Jabba el Hutt en que se ha convertido Mickey Rourke. Penn es un grandísimo actor y casi cada trabajo que realiza es merecedor de premio.
A mi, no obstante, este año me hubiera alegrado que se recompensase el excelente oficio de Frank Langella en la película "Frost/Nixon", donde compone un magnífico ex presidente arrogante que se niega a admitir su derrota; o al eterno secundario Richard Jenkins, nominado en esta ocasión por un papel protagonista en el film "The Visitor".

La otra relativa sorpresa fue el Oscar a la mejor película de habla no inglesa, donde todas las quinielas hablaban de un reñido duelo entre la israelí “Vals con Bashir” y la francesa “La Clase”, aunque finalmente el consolador dorado fue para la japonesa “Departures”.

Sí se ajustó a los pronósticos el merecidísimo Oscar al mejor actor de reparto para Heath Ledger por su inmenso trabajo en “El Caballero Oscuro”. Aunque sospecho que si no hubiera contado con el morbo de haber muerto en extrañas circunstancias poco después del rodaje, posiblemente hubiese quedado también en el grupo de los injustamente olvidados.

Bueno, pues esperaremos al año que viene a ver si por fin Thomas Newman, James Newton Howard, Danny Elfman o Alexandre Desplat consiguen ver recompensada su gran valía.

Ah, sí, se me olvidaba, la mocosa y ñoña Mari Pe de Alcobendas se ha llevado también uno de estos muñequitos.

Cosas veredes, Sancho...

sábado, 21 de febrero de 2009

BANDAS SONORAS CANDIDATAS AL OSCAR


Mañana, 22 de febrero, se celebrará en el Kodak Theatre de Los Angeles la gala de entrega de los premios Oscar, parece ser que presentada por nuestro australiano más guaperas Hugh Jackman.


En el apartado de mejor banda sonora encontramos a cuatro auténticos pesos pesados del panorama actual de la composición de música para películas: Danny Elfman, habitual de las películas de Tim Burton; James Newton Howard, una de mis debilidades; Thomas Newman, eterno candidato sin premio, en la que es su novena nominación; y el parisino Alexandre Desplat.
Junto a ellos está nominado el indio A.R.Rahman, por su trabajo en el film "Slumdog Millionaire".

Ninguno de ellos ha ganado anteriomente la dorada estatuilla. Veremos que pasa mañana.

De momento os dejo aquí unos breves fragmentos de las bandas nominadas para que os hagáis una idea.


Danny Elfman: Por "Milk (Mi nombre es Harvey Milk)".






James Newton Howard: Por "Defiance (Resistencia)".






Thomas Newman: Por "Wall-e".






A. R. Rahman: Por "Slumdog millionaire".






Alexandre Desplat: Por "The Curious Case of Benjamin Button".




miércoles, 18 de febrero de 2009

EDVARD GRIEG. CANCIONES

"Edvard Grieg acompañando a su esposa" - P.S. Krøyer (1898) - Nationalmuseet - Estocolmo.

La figura capital en la música escandinava, junto al finlandés Sibelius, es el noruego Edvard Grieg. Sus obras más populares, sin duda, son su celebérrimo Concierto para piano en La menor y las dos Suites “Peer Gynt”, compuestas éstas a partir de la música incidental creada para la obra literaria del mismo título del dramaturgo, también noruego, Henrik Ibsen.

Grieg fue un músico muy prolífico, pero fundamentalmente de pequeñas piezas para piano y ciclos de canciones. El propio compositor decía:

Bach y Beethoven han edificado en el cielo gigantescos templos y bellísimas catedrales. Yo he querido, sin embargo, construir viviendas para los hombres, simples viviendas en las cuales se sintiesen a gusto y felices”.

En este sentido, dentro de la obra de este miniaturista musical destacan sus ciclos de canciones, cuya principal inspiración, destinataria e intérprete fue la cantante Nina Hagerup, prima y esposa de Grieg.

La elegancia y lirismo de la música de Edvard Grieg se hace pura poesía en sus canciones, de aparente simplicidad, que constituyen pequeñas pero intensas obras maestras.

Hoy he querido traer algunas de estas canciones, todas ellas rebosantes del intimismo y exquisitez musical que caracteriza la obra del compositor noruego, buscando además que los intérpretes fueran escandinavos.

En primer lugar, podemos escuchar a la grandísima soprano sueca Birgit Nilsson interpretando la canción "En Svane" (Un cisne). Es la segunda de las seis canciones que componen la Opus 25 de Grieg, sobre poemas de Henrik Ibsen.


video de operazaile


La siguiente canción, “Veslemöy” (La muchacha), pertenece al ciclo de ocho canciones "Haugtussa", sobre poemas de Arne Garborg. La traigo aquí cantada por otra sueca, la excepcional mezzosoprano Anne Sofie Von Otter, acompañada al piano por Bengt Forsberg:





“Veslemöy” (La muchacha)
Es delgada, morena y dulce con rasgos puros,
Unos ojos hondos y grises y una forma de ser tranquila y soñadora.
Es como si un encanto estuviese sobre ella;
En sus movimientos y en sus palabras hay una paz silenciosa.
Por debajo de su frente bonita, brillan sus ojos como a través de una niebla;
Es como si su vista alcanzara lo más profundo de otro mundo.
Sólo su pecho se mueve pesado y con miedo y su boca tiembla.
Se estremece vulnerable y frágil.
También es preciosa y joven.


A continuación podemos oir "Vaaren" (La primavera), perteneciente al ciclo de doce canciones sobre poemas de Aasmund Olavson Vinje, que os presento cantada por la noruega Kirsten Flagstad, una de las grandes sopranos wagnerianas del pasado siglo, como Birgit Nilsson. Como curiosidad, "Vaaren" fue una de las canciones que interpretó la Flagstad en el concierto de su despedida en Londres el dia 7 de septiembre de 1957:



video de 242463


Volvemos ahora a escuchar a Anne Sofie Von Otter, esta vez interpretando la hermosa canción "Med en Vandlilje" (Con un lirio de agua), que pertenece, como "En Svane", al ciclo de seis canciones sobre poemas de Henrik Ibsen:



video de zoologischergarten


Aquí tenemos de nuevo a Anne Sofie Von Otter, esta vez con la maravillosa “Jeg elsker dig” (Te quiero), con letra de Hans Christian Andersen, una de las primeras composiciones de Grieg, pero que es una muestra palpable de la madurez lírica del noruego.




"Jeg elsker Dig" (Te quiero)
Cada uno de mis pensamientos empieza por ti,
eres el primer amor de mi corazón,
te quiero como nadie ha querido en la Tierra,
te quiero ahora y por siempre.


Y aquí está la misma canción en la voz de otro sueco genial, el tenor Nicolai Gedda:


video de Herur22


Para finalizar, traigo la que posiblemente sea la canción más conocida de Grieg, "Solveigs Sang" (La canción de Solveig), que forma parte de la segunda Suite "Peer Gynt". En ella, Solveig expresa su fe en que su amado Peer, en esos momentos al otro lado del mundo, regresará a buscarla, aunque pase el invierno, desaparezca la primavera, y con el fin del verano termine el año. Y si acaso él ha muerto, seguirá esperándole allí.

Podemos escucharla en la voz de la joven soprano noruega Marita Solberg:


video de stolof

"Solveig sang" (La canción de Solveig)
El invierno y la primavera pueden marcharse,
y los días de verano pueden desaparecer, y el año puede morir.
Pero estoy segura de que un día volverás conmigo,
y por eso te esperaré fiel, como una vez te prometí.
Que Dios te proteja, allá donde tus pasos te lleven.
Que te consuele, si llegas hasta Él.
Aquí esperaré tu regreso sola.
Y si tú me esperas allá arriba,
Entonces allí nos encontraremos,
mi amor.

viernes, 13 de febrero de 2009

BERNARD HERRMANN. LA MAGIA DE LA MUSICA EN EL CINE


Bernard Herrmann ha sido posiblemente el más importante compositor de bandas sonoras del pasado siglo, formando parte de lo que se conoció como “La Edad de Oro de la música en el cine”, junto a talentos como Alfred Newman, Franz Waxman, Erich Wolfgang Korngold, Max Steiner o Miklós Rózsa.

Sin embargo, su obra supone una clara ruptura con la línea clásica que hasta entonces imperaba en la industria cinematográfica (el llamado “sonido Hollywood”), comandada principalmente por Max Steiner (“Casablanca”, “Lo que el viento se llevó”), un excelente compositor, sin duda, a quien se atribuye la introducción en el score del leitmotiv o tema principal recurrente para subrayar la presencia de los personajes o los lugares, pero cuya música es fundamentalmente descriptiva y ajustada a la acción; mientras que Herrmann incorpora un tratamiento más íntimo, buscando la descripción emocional global, sin centrarse en los leitmotiv individualizados. Es el compositor de las emociones.

Herrmann se calificaba a sí mismo como compositor neo-romántico. Su música es imaginativa, temperamental y siempre provocadora de un notable impacto dramático. Construye unos sonidos coloridos y sensuales, con orquestaciones muy elaboradas y una amplia instrumentación. Es frecuente en su obra el uso del ostinato (fragmento de melodía o ritmo que se va repitiendo persistentemente en una composición).

Aparte de las bandas sonoras para el cine, trabajó para el teatro, la radio, la televisión (donde compuso la música de las series “Twilight Zone” o “La hora de Alfred Hitchcock”) y firmó diversas cantatas, sinfonías y la ópera “Cumbres Borrascosas”.

Bernard Herrmann nació en Nueva York en 1911. Su padre le inculcó el amor por la música llevándole a numerosos conciertos y óperas y regalándole un violín, lo que llevó al muchacho a decantarse por el aprendizaje y práctica musical.

En 1938 coincidió, trabajando en la radio, con Orson Welles, un encuentro que cambiaría el rumbo de su vida profesional para siempre. Fue con Welles con quien, en 1941, se introdujo en el mundo del cine, escribiendo la música para su obra maestra “Ciudadano Kane”, por la que Herrmann fue nominado para el Oscar. Curiosamente, conseguiría ese mismo año el único Oscar de su carrera por otra composición, la partitura de “El hombre que vendió su alma” (The Devil and Daniel Webster), de calidad muy inferior, a mi juicio. También con Welles, firmó la música de “El Cuarto Mandamiento” (The Magnificent Ambersons).

Aquí podemos oir el tema principal de "Ciudadano Kane":


Tres excepcionales bandas sonoras: “El fantasma y la señora Muir”, “Jane Eyre” y “Ana y el rey de Siam”, constituyen la muestra del Herrmann más lírico, desbordante de romanticismo, y contribuyeron a elevar aún más su fama y reputación en el mundillo hollywoodiense, llamando la atención de otro genio sin parangón, Alfred Hitchcock.

Aquí podemos escuchar el preludio de "El fantasma y la señora Muir":



Y el tema principal de "Jane Eyre":


video de vamfv

Nadie como Herrmann ha sabido transmitir a una partitura la angustia, el dramatismo y la emoción del cine de Alfred Hitchcock como lo hizo el neoyorquino. Desde su primera colaboración para la banda sonora de “Pero ¿quién mató a Harry?” (The trouble with Harry) en 1955, transcurrieron 11 años y 8 extraordinarias películas (entre ellas, “El hombre que sabía demasiado”, “Vértigo”, “Marnie”, “Psicosis” o “North by Northwest”) que han dejado una de las mejores y más fructíferas asociaciones director-compositor de la historia, con algunos de los momentos más sublimes de la música en el cine. En 1966, durante el rodaje de “Cortina Rasgada” (Torn Courtain), se produce el desencuentro definitivo con el director británico. Al parecer, Hitchcock rechazó la partitura porque pretendía que se incluyera un toque más moderno y cercano al pop del momento, a lo que Herrmann se negó en redondo, encomendándose finalmente el trabajo a John Addison. Fue la gota que colmó el vaso de una relación complicada de estos dos genios, ambos poseedores de un peculiar y fuerte carácter.

Aquí podemos escuchar el preludio de "North by Northwest" (Con la muerte en los talones):



Y el preludio de "Marnie":



Y aquí algunos fragmentos de la música compuesta por Herrmann para "Cortina Rasgada" y que fue rechazada por Hitchcock. Como se puede apreciar, mucho más oscura e intensa que la que finalmente firmó Addison:


video de konway87

Otra de las asociaciones profesionales de Herrmann que determinaría su definitiva consolidación en el Olimpo de la composición de bandas sonoras, fue la establecida, a partir de 1957, con el técnico de efectos especiales Ray Harryhausen, el perfeccionador y divulgador del legendario sistema Stop Motion. De esta colaboración saldrían magníficas partituras como las de “Simbad y la princesa”, “Los viajes de Gulliver”, “La Isla Misteriosa” y, sobre todo, “Jasón y los argonautas”. Herrmann encontró en estas películas, rebosantes de fantasía e innovación tecnológica, un campo perfecto para dar rienda suelta a su imaginación y romper definitivamente con los cánones más clásicos de la composición de bandas sonoras.

Podemos oir el Preludio de "Jasón y los Argonautas":


Al finalizar su relación con Alfred Hitchcock en 1966, Herrmann comienza a trabajar con François Truffaut, con quien firmaría otras dos sensacionales bandas sonoras, las de “La novia vestía de negro”, que, paradójicamente, fue considerada por la crítica el más hichcockiano de los trabajos de Herrmann, y "Fahrenheit 451", de la cual podemos escuchar a continuación su Preludio.


video de SoundtracksForLiving

La última composición de Herrmann para el cine fue el score de "Taxi Driver" (1975), donde se aparta de su línea habitual, incluyendo elementos de jazz y blues para realzar el ambiente urbano del film, con ese solo de saxo absolutamente hipnótico y sensual. Al día siguiente de finalizar la grabación de esta banda sonora, Herrmann falleció en Hollywood a los 64 años.

video de deviantrake

Sin duda uno de los momentos inolvidables de la música de Herrmann lo constituye el sonido de las cuerdas que acompaña la secuencia de "Psicosis" del apuñalamiento en la ducha. Se cuenta que Hitchcock se fue de vacaciones, quedándose Herrmann trabajando en la música del film, con una sola indicación del director: que no introdujera melodía alguna en la secuencia de la ducha, ya que prefería que el asesinato sólo se ilustrase con el sonido del agua corriendo. Cuando regresó Hitchcock, escuchó el sonido de los violines "chillando" mientras se acuchillaba a Janet Leigh, y sólo pudo mostrar su emocionada aprobación. Herrmann le comentó: "Pero Hitch, pensé que no quería ninguna música durante toda la secuencia". A lo que Hitchcock le replicó: "inadecuada sugerencia, muchacho, inadecuada sugerencia".


video de newcarscent7


Finalizo este pequeño homenaje al maestro Bernard Herrmann con este video que contiene el tema principal de una de sus mejores partituras, “Vértigo”, un auténtico compendio de las virtudes de este extraordinario compositor, que supo dotar a la banda sonora de inteligencia, sensibilidad, sofisticación y alma, elevando la composición de música para películas a la categoría de arte.


video de Greengrassmusic

jueves, 12 de febrero de 2009

RICARDO CHAILLY A LES ARTS


Parece ser que ya es definitivo. El director italiano Ricardo Chailly será el sustituto de Lorin Maazel al frente de la Orquestra de la Comunitat Valenciana. Así lo anuncia hoy la prensa valenciana, que lo da por confirmado "a falta de una serie de flecos".

Experiencia no le falta. Comenzó como director asistente de Claudio Abbado en La Scala, y ha dirigido en los principales recintos operísticos, siendo durante muchos años director titular de la orquesta del Concertgebouw de Ámsterdam. Ha sido director musical del Teatro Comunal de Bolonia y de la Ópera de Leipzig.

De momento, en Valencia, el próximo 21 de febrero podremos escucharle en el Palau de la Música al frente de la Gewanhausorchester de Leipzig en la Sinfonía nº 2 de Beethoven, y la 3ª de Bruckner; y el 17 de abril con la Orquestra de la Comunitat Valenciana en el Auditorio de Les Arts en un programa que incluye obras de Rossini y Stravinski.

Ya podemos irnos preparando que nos llega Rossini a cascoporro.

martes, 10 de febrero de 2009

FAUST (Gounod) - Palau de Les Arts - 08/02/09

Finalmente, asistí a la representación del "Faust" de Gounod que venía siendo noticia últimamente más por sus cambios de reparto que por sus propuestas artísticas. El resultado del conjunto me pareció altamente positivo, pese a algún despropósito que ya nos temíamos.

Se trata de una coproducción del londinense Royal Opera House, la Opéra de Monte-Carlo, la Opéra de Lille, y la Fondazione Teatro Lirico Giuseppe Verdi de Trieste, que cuenta ya más de 20 años. La puesta en escena original de David McVicar, adaptada por Bruno Ravella, es espectacular, de tintes clásicos, aunque la acción se traslade ligeramente de época y lugar (de la Alemania del siglo XVI a la Francia de finales del XIX), con un tono sombrío y gótico que considero muy adecuado al drama mefistofélico, apoyado por una escenografía de Charles Edwards barroca e impactante. El cuidado movimiento escénico y el inteligente uso de los espacios permiten el seguimiento de la acción, jugando en muchas ocasiones con los segundos planos. La escena del crucifijo, provocadora donde las haya, el episodio heroinómano de Fausto, la bailarina embarazada y el travestismo de Schrott en esa noche de Walpurgis que acaba en orgía, me parecieron lo más chocante y prescindible de esta puesta en escena que, en general, valoro muy positivamente.
La iluminación de Gary Dooley resultó efectista cuando debía serlo y ayudó a conseguir el tono sombrío buscado por la regia sin pecar de oscuridad.
El vestuario de Brigitte Reiffenstuel es muy vistoso, aunque mostrase algunos anacronismos.
El típico ballet de toda ópera francesa que se precie se incluye en esta ocasión en la escena de la Noche de Walpurgis, con coreografía de Esther Balfe. Unos buenos bailarines, descalzos, protagonizan un interesante número a modo de paródica “Giselle”.

En el apartado puramente musical, empezaré por lo mejor: El Coro de la Generalitat, sin duda. Excelso. No se puede hacer mejor. ¡Qué barbaridad!. La capacidad de asombro ante la emoción desmedida que genera este grupo de hombres y mujeres, con su perfección, sigue superando cualquier expectativa. El empaste y poderío que demuestran en cada intervención alcanzó su culminación en el brillantísimo coro masculino "Gloire immortelle de nos aïeux" del acto IV.

Frédéric Chaslin fue el encargado de sustituir al frente de la Orquesta de la Comunitat Valenciana al presunto enfermo Lorin Maazel. Maazel nunca ha dirigido "Faust", con lo que no podemos saber como lo hubiese hecho. Todo apunta a que muy bien como suele ser norma en él. No obstante, me cuesta creer que Maazel hubiera conseguido superar la emotividad, la fuerza, el dramatismo, la expresividad y la poesía que logró transmitir ayer Chaslin. Sin duda el francés conoce bien el repertorio y manejó la batuta con autoridad, guiando las secciones con precisión milimétrica y extrayendo unos sonidos cálidos y robustos de esta Orquesta, extraordinariamente cohesionada, que muestra cada día mayor musicalidad y perfección. A los músicos se les ve disfrutar con lo que hacen, y transmiten al oyente ese placer de tocar bien. Impecables estuvieron todas las secciones. Una vez más, volvió a lucirse el primer clarinete en un par de solos espléndidos, así como el primer violín, quien en la Cavatina “Salut, demeure, chaste et pure” alcanzó un grado de lirismo exquisito, derrochando todo el sentimiento que el tenor no logró acabar de transmitir.

En cuanto a las voces solistas:

Mario Cassi, como Valentin, demostró potencia y buen gusto, superando los escollos de su aria "Avant de quitter ces lieux" con aparente facilidad y mostrando un fraseo elegante. Lástima que como actor resultase muy mejorable.

La Siebel de Ekaterina Gubanova estuvo aceptable, aunque anduvo un poco falta de fuelle y el vibrato afeaba su gama alta. En ocasiones se desconcentraba en su actuación y la cojera de su personaje igual era exagerada que milagrosamente inexistente.

Annie Vavrille como Marthe dibujó bien el perfil de su personaje aunque el timbre de su voz no me resultó nada atractivo.

Vittorio Prato fue un Wagner simplemente correcto, pasando sin pena ni gloria por el escenario en ese corto y poco lucido papel.

Vittorio Grigolo estuvo muy bien en el complicado papel protagonista. Comenzó su interpretación del anciano doctor con un look y movimientos un tanto exagerados que me recordaron al Dick Van Dyke de Mary Poppins. Vocalmente, este comienzo fue adornado inteligentemente por el italiano, acentuando el vibrato para avejentar una voz que, tras la transformación, surgió con toda su frescura y claridad. Exhibió volumen y buen control del fiato, así como una descarada facilidad para los agudos, si bien tendían a abrirse en alguna ocasión, sin que acabase de redondearlos. Le faltó capacidad de matización y de regular intensidades, lo que hizo que no transmitiese toda la emotividad que en ciertos pasajes, especialmente el dúo con Marguerite del acto III, se hacen imprescindibles.

Erwin Schrott fue de menos a más. Comenzó bastante reservón, pero en la segunda mitad refulgió esa maravillosa voz, amplia, poderosa y consistente con que regala nuestros oídos el uruguayo. Su presencia escénica es imponente y perfiló magistralmente el aspecto sarcástico y seductor del rol, aunque no acabó de sacar toda la maldad de Méphistophélès, si bien estuvo impresionante en la escena de la maldición de Marguerite, posiblemente lo mejor del uruguayo, con un tremendo "Marguerite, sois maudite! à toi l'enfer!". En cualquier caso, el Sr. Netrebko fue con diferencia el gran triunfador de la velada.

Alexia Voulgaridou, aunque no os lo creáis, no es una de mis cantantes favoritas. ¿Qué le vamos a hacer?. No puedo evitarlo, a mi esta señora no me gusta. Algo haría bien, pensaréis. Pues sí: saludar elegantemente al final y largarse de una escena que jamás debía haber pisado. Bueno, para ser justos, en la dificilísima escena final bastante hizo con que no se le calase el motor. Sacó toda la fuerza que pudo y se movió en la zona alta con unos agudos, algo planos, pero bastante aceptables, sin perder la compostura ni quebrarse. Fue lo mejor de su actuación, aunque ignoro si acabaría defecándose encima, pues el esfuerzo se veía que era límite. El timbre de su voz es agradable, pero en cuanto tiene que moverse con fluidez hacia la zona grave o realizar un mínimo salto interválico, se quiebra su línea de canto y la voz se desmorona, al estilo de (perdóneseme la herejía) la Callas de los últimos años. Personalmente, me parece inaceptable que se coloque en este papel a una mujer absolutamente incapacitada para las agilidades y adornos. En el comienzo del aria de las joyas resultó simplemente ridícula, con unos grititos desacompasados patéticos. Se preparó bien los agudos para alcanzarlos con seguridad y con eso asegurarse el aplauso fácil. Tuvo a bien la griega, eso sí, para que su leyenda no decaiga, de obsequiarnos con un inmisericorde gallo poco antes de comenzar la escena final. Consiguió algunos buenos momentos en que jugó con las medias voces y filados, pero su capacidad de transmisión de emociones es nula. Su voz me parece profundamente inexpresiva, con lo que su actuación, en el mejor de los casos, acaba siendo fría, sosa, aburrida, vulgar.

Al final disfrutamos de un extraordinario espectáculo operístico que ni la vulgar consiguió empañar.

De postre, para desengrasar, este video de Schrott en plan torero:

video de fritz51269

jueves, 5 de febrero de 2009

NETREBKO, GARANCA Y ATTICUS EN LONDRES.

Anna Netrebko, como Julieta, y Elina Garanca, en el papel de Romeo, encabezan el cartel de "I Capuleti e i Montecchi" de Bellini que se representará en el Royal Opera House de Londres el próximo mes de Marzo.

Junto a ellas estará el tenor argentino afincado en Viena, Dario Schmunck, en el papel de Tebaldo. Se dice que Schmunck comenzó cantando en un grupo de heavy-metal sin conocimiento alguno de música clásica, y que hace apenas 18 años no había cantado una sóla aria de ópera ni sabía leer una partitura. Sin duda, un ejemplo de que los caminos hacia la lírica son, muchas veces, sorprendentes.
Aquí tenemos al heavy Schmunck, en una grabación no muy buena, cantando la Cavatina de Faust “Salut! Demeure chaste et pure”, que puse el otro día cantada por Kraus. Las comparaciones son odiosas...


video de Pawelp

La producción que se presenta en Londres cuenta con la dirección escénica del italiano Pier Luigi Pizzi, de quien se pudo ver en Madrid el año pasado su Orfeo, mientras que Sir Mark Philip Elder se encargará de dirigir al Coro y Orquesta del Royal Opera House.
Y, si no ocurre ningún contratiempo, allí estaré yo el día 7 de marzo. Ayer conseguí las entradas en apenas 15 minutos, gracias a una organización de la venta por internet, a través de la web del ROH, absolutamente modélica (Helga: aprende, chata).
Confiemos que no ocurran imprevistos y el virus Schmidt no llegue a Londres, para que pueda disfrutar de ese espectáculo, que se presume muy importante, con todos los cantantes previstos.
De momento, podemos escuchar a Netrebko y Garanca en el Dueto: "Crudel, d'onor ragioni"


video de homoclassicus

Y aquí a la Netrebko en "Eccomi... Oh quante volte"


video de Quetzalcom