lunes, 2 de abril de 2012

"TOSCA" (Giacomo Puccini) - Palau de les Arts - 01/04/12


Por mucha crisis que haya y aunque “Tosca” sea siempre un título de los que tienen garantizado un tirón popular, no considero que tenga mucho sentido reponer una producción cuando apenas han transcurrido diez meses desde su estreno, sobre todo si tampoco la dirección escénica era como para tirar cohetes y más aún si, como ocurrió ayer, los resultados musicales son mucho peores.

Después de haber asistido el día anterior a una extraordinaria “Thaïs”, tanto en el plano escénico, como en el musical y vocal, esta “Tosca” me ha defraudado enormemente. La dirección de escena no me gustó ya el año pasado, la musical de Omer Wellber está a años luz del trabajo de Zubin Mehta y sustituir en el papel de Scarpia a Bryn Terfel por Marco Vratogna es como cambiar a Messi por el cojo Manteca. Pero vayamos por partes.

Esta coproducción de Les Arts con la Fundación del Festival Puccini de Torre del Lago, la Ópera de Montecarlo y el Teatro Regio de Turín, cuenta con la dirección escénica ideada por Jean-Louis Grinda que ya tuve ocasión de comentar con motivo de su estreno en el Festival del Mediterrani del pasado año, por lo que a aquella crónica me remito (podéis leerla aquí) y poco más tengo que decir, salvo reiterarme en lo poco que me gustó. Me sigue pareciendo una demostración de absoluta falta de ideas que lo único que hace es llevar a cabo un planteamiento muy clásico con una escenografía pobre y absurda y una vulgar dirección de actores. Para colmo, hubo un problema en el tercer acto con la bajada de la escenografía, que parece que se quedó enganchada, haciendo un ruido horroroso.

La dirección musical de Omer Wellber no me ha gustado. Ya hace tiempo que vengo diciendo que, conforme le voy viendo dirigir más funciones, más se asienta mi sensación de que no es el genio que nos quisieron vender. La principal reacción que me suele provocar siempre el director israelí es la de desconcierto y ayer no fue una excepción. Su lectura de la genial página pucciniana me pareció superficial y, en apariencia al menos, caprichosa. Sus tiempos fueron lentísimos, pero, junto a estas ralentizaciones que rozaban lo exasperante, introducía unas extrañas aceleraciones sin sentido, todo ello adornado con una gestualidad desbocada, más propia, como decía mi amiga Assai, de un conductor de cuádrigas que de un director de orquesta.

Lo malo es que toda esta exageración no se tradujo en la más mínima emoción. En los pasajes más intensamente dramáticos la dirección resultó plana, con una falta absoluta de tensión y en ningún momento logró, a mi juicio, crear la atmósfera precisa. Si acaso sólo salvaría el inicio del tercer acto. Para empeorar las cosas no se privó de toques efectistas, como las paradinhas estratégicas para provocar el aplauso a los cantantes, y nos castigó con un altísimo volumen que, junto a los vozarrones de Jorge De León y Oksana Dyka, hacían, con toda seguridad, la función audible desde el exterior. Fueron evidentes también numerosos desajustes y claras descompensaciones, culminando una noche para el olvido, en la que, tener tan presente la dirección de Zubin Mehta del año pasado, hizo mucho más cruel y sangrante la comparación.

La Orquesta de la Comunitat Valenciana, con esta dirección, no pudo brillar como de costumbre. Esos desajustes que ya he mencionado antes, posiblemente indiquen la falta de rodaje con un director que, según me han comentado, no se ha caracterizado precisamente por los ensayos en esta “Tosca”. Pese a todo, la calidad de los músicos es incuestionable y durante toda la noche destacaron las intervenciones del clarinete de Tamás Massànyi y la sensacional actuación en el tercer acto de los cellos de Guiorgui Anichenko y Arne Neckelmann.

Buenas prestaciones tanto del Coro de la Generalitat como de la Escolania de la Mare de Déu dels Desemparats, aunque también se apreciasen algunos desajustes con el foso y el Tedeum no resultase tan lucido como siempre se espera, debido a los tiempos marcados por Wellber y al deficiente Scarpia de Marco Vratogna. Me volvió a llamar la atención en los saludos finales la ausencia del director del Coro de la Generalitat, Francesc Perales.

Lo mejor de la noche vino de la mano de Jorge de León como Cavaradossi. Ya sabemos que el tenor tinerfeño tiene un centro a veces oscilante e inestable y alguna puntual desafinación, pero sus agudos son brillantes y auténticos cañonazos, y su entrega en escena es irreprochable, así como su valentía a la hora de abordar por derecho cualquier obstáculo de la partitura con absoluta convicción. Hizo gala de un fraseo intencionado y lleno de expresividad, y de buen control del fiato. En “Recondita Armonia” entró un tanto frío, asomando un feo vibrato inicial, pero resolvió la página con brillantez, con gran musicalidad y unos agudos espectaculares, obteniendo la primera ovación de la noche. Aunque eso no sería nada para su culminación de un “E lucevan le stelle…” muy meritorio, donde tuvo que lidiar con el tempo lentísimo que imprimió Wellber, y donde tan sólo se echó de menos una mayor capacidad de matización, que fue premiado con un torrente de bravos y unos larguísimos aplausos que me hicieron incluso pensar que se fuera a producir un bis que hubiera sido un premio excesivo.

La Tosca de Oksana Dyka, como ya ocurriese en el estreno, resultó más fría que una bolsa de menestra congelada. Sigue sin apenas regular intensidades y se limita a dar rienda suelta a su enorme y potente voz, pero sin llegar a transmitir ninguna emoción. Su fraseo es abrupto y chillón, y el “Vissi d’arte” que se marcó me pareció bastante penoso, pura rutina sin el más mínimo matiz. En frases clave para sacar toda la fuerza del personaje, como “Questo è il bacio di Tosca!” o “E avanti a lui tremava tutta Roma!”, parecía que estuviese leyendo el precio de los pepinos.

La guinda la puso el Scarpia compuesto por Marco Vratogna, con su característica voz fea, opaca y de emisión sucia con la que nos obsequió cantando de forma tosca, a empujones, arrastrando la voz. Toda la perversidad de Scarpia que transmitía Bryn Terfel con un simple gesto de su ceja, aquí estaba ausente; la única maldad que se vislumbraba era lo malo que es el propio Vratogna cantando. Bueno, cantando y actuando, porque el tío se plantaba estático, mirando el patio de butacas cual clik de Famobil y con eso ya estaba bien. Ni siquiera supo simular que escribía el salvoconducto, limitándose a echar rayotes. Estoy seguro de que si a Cavaradossi, en lugar de llevárselo a la cámara de tortura, le dejan en la habitación de Scarpia con Vratogna cantándole a la orejita, confiesa hasta haber matado a Manolete. Su “Non mi vendo a prezzo di moneta” fue horroroso, plano e inaudible. Lo mejor que hizo en toda la noche fue morirse, aunque, para desconsuelo de algunos, sólo estaba fingiendo. Pese a todo lo dicho, lo cual demuestra que no tengo ni idea, fue ovacionado en los saludos finales e incluso hubo algún cachondo que le braveó.

Del resto del reparto merece destacarse el buen Sacristan de Fabio Previati y Gianluca Buratto como Carcelero. Bien estuvo también el niño José Escorihuela. Angelotti fue el bajo finlandés Mika Kares quien, como siempre, le pone mucha intención, pero esa voz de emisión cuasi anal, no acaba de convencerme.

Al final, encendidos aplausos para todos los intervinientes, incluidos Wellber y Vratogna, con una ovación larga y ensordecedora para el tenor Jorge de León, esta sí más coincidente con mi criterio.

Una vez más la sala principal de Les Arts presentaba demasiados huecos para tratarse de un estreno en día festivo y con una ópera popular como “Tosca”. Hasta los que se creen VIPs fueron muchos menos que en otras ocasiones, apenas la Consellera de Cultura, el presidente del Consejo Jurídico Consultivo, pelotas varios y algún engominado ex Secretario Autonómico recientemente cesado. Nada que ver con el oropel de la “Thaïs” del sábado, con el President Fabra y la Infanta doña Pilar a la cabeza. Es lo que tiene que cante Plácido Domingo.

Por cierto, ahora sólo queda esperar a ver si Domingo consigue mejorar la dirección de Wellber en las últimas funciones. A priori me hubiera atrevido a apostar que no, pero después de lo escuchado ayer, todo es posible.

Aquí podéis leer también la siempre interesante y fundamentada crónica de Maac.

36 comentarios:

  1. Anónimo2/4/12 23:29

    Yo estuve anoche también en "Tosca" y me gustó la representación. La puesta en escena ya la conocía del año pasado, por lo que no me impactó ni para bien ni para mal. Destacaría que me pareció que la iluminación fue buena.
    Cada día que pasa me parece más que Wellber es un mal Director. Anoche fue el peor de todos. Con unos tempi extraños, con acelerones, exceso de volumen, pareciendo querer cuidar a los cantantes, cuando fue toda la noche al revés, los pobres cantantes fueron locos siguiendo a Wellber. Yo creo que Puccini suena a otra cosa, aunque esta orquesta, aún dirigida por Wellber, suena bien. Volveré el día 19 y dirige Plácido Domingo. Siendo un Director flojo, seguro que es mejor que Wellber, aunque para eso hace falta poco. E intentar comparar a Wellber con Metha es inimaginable e imposible.
    Oksana Dyka es una buena soprano. Tiene una bella y potente voz. Yo lo único que le encuentro es que es "muy fría" y entonces no transmite la emoción que debiera, aunque su canto es más que correcto.
    Jorge de León es un gran tenor, ha progresado muchísimo y vocalmente se encuentra en un momento en que este Cavaradossi le viene como anillo al dedo. Estuvo formidable y me gustó mucho más que Marcelo Alvarez el año pasado, tenor que canta muy bien a Verdi y no tan bien a otros compositores.
    Marco Vratogna fue un Scarpia correcto, no sé por qué esa manía por decirlo de alguna forma. Las comparaciones son odiosas y a él le pesó como un lastre insoportable la comparación imposible con el estratosférico Scarpia de Bryn Terfel el año pasado. De los tres fue el más flojo.
    Muy correcto el resto del reparto.
    A mí me gusto mucho esta "Tosca". Mañana voy a "Thais" a la que espero con impaciencia después de todo lo leído. Ya dejaré un comentario con mi modesta opinión.
    Y lo dicho, a mí me gustó mucho "Tosca", especialmente Jorge de León.
    Un aficionado a la ópera.

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  2. Gracias por tu comentario, Aficionado a la Ópera.
    Me alegra muchísimo que ayer pudieses disfrutar de la "Tosca", a mí me hubiese gustado, pero si no llega a ser por De León igual hasta me duermo.
    Es verdad que la puesta en escena no nos impacta por ser ya conocida, pero si es mala, que yo creo que lo es, no deja de serlo por sernos conocida.
    Dyka canta bien en cuanto a que da todas las notas, pero cantar bien un "Vissi d'arte" no sólo es dar las notas, sino transmitir emociones y aquí Dyka saca un suspenso incuestionable.
    La crítica a Vratogna (exagerada, sin duda) no tiene por causa la comparación con Terfel, sino su deficiente, a mi juicio, composición tanto vocal como actoral del personaje.
    Espero tus comentarios de Thaïs.
    Un saludo.

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  3. Estimado Atticus, interesante crónica.

    Estuve en el estreno y aunque comparto la mayor parte de tus apreciaciones permíteme que te cuente lo que yo aprecié.

    Para mi hay dos percepciones muy diferentes de esta Tosca dependiendo de si la viste en el pasado festival del Mediterráneo dirigida por Zubin Mehta y con Bryn Terfel en el papel de Scarpia, o no la viste.

    El público que no vio aquellas funciones, muy posiblemente saliese del Palau pensando que en líneas generales había asistido a un espectáculo más que correcto, y por parte de alguno de los intérpretes (Jorge de León) a un nivel muy por encima de la media habitual en los tenores del panorama operístico actual.

    Pero los que vimos el año pasado algunas de las representaciones, no podemos obviamente evitar hacer algunas comparaciones. La primera obviamente la dirección musical. Y ahí si que el maestro Zubin Mehta gana por goleada a Omer Wellber. Su lectura de la partitura el año pasado en algunas de las funciones me pareció extraordinaria, llegando a sublime en algunos instantes. Ayer la de Omer Wellber no me pareció mala, sino simplemente correcta, a excepción de un par de instantes (especialmente durante el Te Deum donde se produjo en un par de ocasiones una descordinación entre la orquesta y Marco Vratogna de escándalo) y de un exceso de volumen en varios instantes. Menos mal que cantaban Dyka y de León, porque otros cantantes hubiesen quedado totalmente tapados por la orquesta.
    En la otra comparativa que es el papel de Scarpia, la goleada a favor de Bryn Terfel sobre Marco Vratogna es de escándalo. Terfel es el mejor Scarpia que yo he visto nunca. Y en las funciones a las que yo asistí el año pasado bordo el papel, estando a nivel vocal DESCOMUNAL. Todo un "first class" a nivel mundial. No me extiendo más en este punto. Tu ya lo has expresado con claridad. Los que aplaudieron con fuerza ayer la actuación de Vratogna, no habían visto obviamente a Terfel el año pasado.

    De Oksana Dyka esperaba que desde el año pasado hubiese añadido matices y calidez a su personaje, pero desde luego en la función de ayer no lo hizo. La calificaría de simplemente correcta. Y efectivamente en su "Vissi d´arte" faltaba mucha, pero que mucha emoción.

    En cuanto a Jorge de León, a mi personalmente me pareció COLOSAL, con momentos que rozaron la perfección absoluta. He escuchado bastantes "E lucevan le stelle" en directo cantados por muy buenos cantantes y cientos de veces grabaciones de los más grandes. Y a mi la interpretación de ayer de Jorge de León me pareció a la altura de los mejores de todos los tiempos. Y no exagero un ápice. Los amantes de la ópera "perseguimos" esos instantes mágicos en los que un cantante nos traslada con su voz directamente al Paraíso. Instantes que nos gustarían que no se terminasen nunca. Y eso me pasó a mi ayer durante la maravillosa interpretación de Jorge de León.
    Repito, es mi apreciación personal, pero a mi solo por haber escuchado esa aria cantada como la cantó ayer Jorge de León, vale por toda una temporada.
    Su "Vittoria!" fue igualmente tremendo y su "Qual ochio al mondo" me pareció pura poesía, cantado con una perfección absoluta.
    Es por voces como la de Jorge de León por lo que amo profundamente la ópera. Y estoy convencido de que si sigue por buen camino va a ser uno de los más grandes tenores de su generación.

    En definitiva, salí feliz del estreno. La magia de esos instantes sublimes pudo con el resto de "inconvenientes". Es como cuando un rayo de luz es capaz de destruir la mayor de las oscuridades. Y ayer hubo una VOZ que me llegó al alma.

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  4. El antagonismo Messi/Cojo Manteca me ha encantado y creo que define perfectamente tus sensaciones en esta magnífica crónica.
    Una abraçada

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  5. Anónimo3/4/12 14:37

    Typical "review" from an ex-singer who never made it through. Shame on you, Atticus!

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  6. jmvicedo: Gracias por tu interesante análisis. Celebro que te compensara la actuación de Jorge de León el resto de despropósitos, porque a mí, por primera vez, una 'Tosca' se me hizo aburrida y larga.
    Desde luego, De León llevó a cabo una gran actuación y merece todo mi aplauso. Su "E lucevan..." fue intenso y desgarrador, pero personalmente eché de menos una mayor capacidad de matiz y la reacción del público fue algo exagerada.
    Me pareció también francamente bueno su "La vita mi costasse".
    Estamos de acuerdo en que es un tenor que puede llegar aún más lejos.

    Josep: Lamentablemente esa fue mi sensación y lo peor de todo es que puede ser el futuro que nos espera, sobre todo si el público sigue jaleando determinadas actuaciones como si hubiesen escuchado a la Callas.

    Anonymous: Siento defraudar tus dotes adivinatorias, pero yo no canto ni en la ducha. Gracias por tu visita.

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  7. Vratogna, ¡ese gran desconocido!. En Madrid ya le hemos padecido un par de veces (Carlo Gérard y Renato) y en Valencia tuve ocasión de escucharle como Amonasro.

    En el fondo he cogido cariño al chaval, le ves al pobre que no sabe hacer nada y da penica. Su voz solo emite frecuencias caninas. Los perros de los alrededores deben estar furiosos.

    Me alegro del éxito de Jorge, porque últimamente me pareció bastante desubicado y su última grabación scaligera me había parecido muy decepcionante.

    Gracias como siempre por la crónica, Atticus.

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  8. Me ha parecido una crónica tan divertida como acertada, no se puede decir ni más ni mejor.

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  9. Dado que asistir a esta Tosca no entra en mis planes, lo que esperaba con más ganas era tu crónica, y no me ha decepcionado en absoluto. Por lo que dices, todo ha ido como me esperaba, teniendo en cuenta el reparto y el agitapalos.

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  10. Arian: Lo que da penica es la gente que tiene que asistir indefensa a los ladridos de Vratogna después de haber pagado una pasta.
    Jorge estuvo bastante bien, aunque creo que la reacción tan entusiasta del público fue un poco excesiva.

    Assai: Ya sé que tú coincides esta vez totalmente con mis impresiones porque tuvimos la desgracia de sufrir esta Tosca juntos.

    Titus: Tú sí que sabes, pájaro... pasando de Vratogna y Wellber...

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  11. Apuesto a que el anónimo es Vratogna. Alguien debería confesar por qué le han contratado en el Palau. ¡Tortura ya!

    A Plácido le escuché en Madrid una Butterfly dirigida, a mi entender, de manera sensacional. Saludos.

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  12. La reacción del público nunca es exagerada. En tiempos de la Callas, también había quien pensaba que el público exageraba con la diva. O sea, el público siempre tiene razón, pese a quien le pese.
    Respecto al agitapalillos, todos estamos francamente de acuerdo.

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  13. Plácido como cantante que es, sabe mimar y acompañar a los cantantes cuando dirige, pero tampoco imprime ningún matiz espectacular.

    Respecto a Vratogna, amigo Atticus, decir que yo le he sufrido...mucho. Pero no te pasa que te da pena abuchearle?. Yo a Schrott, a Pilar Jurado o a Cura no tengo problema, porque además de cantar como el culo, se chulean. El señor Vratogna, canis lupi, no sabe hacer otra cosa. Mira el lado bueno, apenas se le oye...

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  14. Fernando: Lo de Vratogna yo no me lo explico ni aunque fuera el hijo de Helga, pero supongo que igual alguna Agencia tiene algo que ver.
    Ojalá que la Tosca de Domingo nos deje tan buenas sensacones como a tí su Butterfly. Al menos más alma que Wellber le pondrá seguro.

    Alibaby: Cuando digo que la reacción del público me pareció exagerada, me refiero siempre respecto a mi propia opinión que, por supuesto, no tiene por qué ser acertada. Ahora bien, tampoco creo que sea cierto que el público siempre tiene razón. La mayoría mandará, pero no tiene por qué tener razón. Si a eso fuéramos, los programas más vistos en TV, por ejemplo, deberían ser los mejores, y creo que es obvio que no es así.

    Arian: Yo me conformo con que Plácido haga una Tosca menos aburrida que Wellber.
    Yo no he abucheado a Vratogna y no suelo hacerlo con cantantes. A quien habría que abuchear es a quien le contrata.

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  15. Frankopolo5/4/12 18:22

    He asistido a la segunda función de la reposición de Tosca y comparto básicamente la mayoría de comentarios: sin duda lo peor para mí ha sido la dirección musical, a años luz de la de Mehta, al igual que hace poco con La Vida Breve, a distancia sideral de la de Maazel. Sin embargo (por echarle un capote a Wellber) me gustaría apuntar que en el Boris y Eugenio Oneguin, ésta sobretodo en la última función, me sonó a gloria bendita. O sea que tal vez sea un problema de repertorio y debería adecuarse a lo que mejor le vaya.
    Y sobre De León me pareció que estuvo muy bien, pero... que queréis que os diga, a mí me parece que M.Alvarez es mejor cantante, quizás más irregular (pasa del excelente al suspenso en nada) y De León tiene más potencia (¡vaya cañonazos suelta!).
    En fin, una Tosca floja, floja...

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  16. Pues sí, Frankopolo, una Tosca flojísima.
    Es una lástima, porque De León merecía un mejor acompañamiento.
    Marcelo es un buen cantante, aunque irregular, pero, en mi modesta opinión, debido fundamentalmente a querer cantar un repertorio que no es el más adecuado para su voz.
    Respecto a Wellber, su Boris me pareció meritorio y el Oneguin bien en cuanto a lectura, aunque con muchas descompensaciones.
    Un saludo.

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  17. frankopolo6/4/12 14:05

    Por eso he querido especificar la última función del Oneguin, por que yo estuve en las 2 primeras y después en la última y la mejoría fué muy grande, gracias seguramente también, ahora que lo pienso, al cambio en la Tatiana que hizo que todo funcionara estupendamente.
    Saludos.

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  18. Anónimo7/4/12 20:13

    En Valencia se representaron dos "Eugene Oneguin" distintos. Amanda Echalaz enfermó cuando ya estaba ensayando en Valencia y fue sustituida a última hora por la rusa Irina Mataeva, que proporcionó Valery Gergiev. Escuchada ésta, no le gustó a Helga Schmidt que movió sus hilos y consiguió que viniera a cantar Kristine Oppolais, que estaba en La Scala canatado "I Pagliacci". La diferencia fue abismal, entre las funciones que cantó Mataeva y la que cantó Oppolais, que además se grabó en Blue Ray en directo. Wellber, que a mí cada día me gusta menos como Director y al que no veo progresar en absoluto, mejoró mucho en dicha función, aunque "Eugene Oneguin" ha sido de lo mejor que ha dirigido junto a "Boris Godunov". Por lo visto el repertorio ruso le vá mejor que Puccini, que exige un Director de otras características y sensibilidades. No es válida esta comparación, pero también Zubin Metha no estuvo bien en "Don Giovanni" (parecía que Mozart no es su punto fuerte) y ha ofrecido soberbias direcciones de "La Tetralogía", "Turandot", "Tosca", "Fidelio", etc. En cualquier caso, Wellber dirige muy mal "Tosca" y en volumen le gana a cualquier Director que haya pasado por el Palau de Les Arts. Vuelvo a "Tosca". Menos mal que dirige Plácido Domingo y seguro que será mejor. Aunque pese a Wellber, a mí me gustó mucho esta "Tosca", como ya indiqué en mi comentario.
    Un aficionado a la ópera.

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  19. Anónimo8/4/12 00:05

    Amanda Echalaz no enfermó. La cambiaron de última hora porque a la señora intendente no le gustó. He cenado con Amanda, que es una conocida de mi esposa, la noche misma que le dieron la noticia del despido.
    Héctor C.S.

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  20. Anónimo8/4/12 00:55

    Gracias Héctor por aclarar este asunto. Siempre se nos vendió y nadie lo desmintió el tema de la enfermedad. Lo cierto es que Amanda estaba en Valencia y a partir de ahí las cosas sucedieron como he explicado. Me temo que Irina Mataeva aún le gustó menos a la Sra. Schmidt que Amanda Echalaz y de ahí el nuevo cambio ya que el tema no tenía vuelta atrás. Siempre he tenido buenas referencias de Amanda Echalaz por lo que creí lo de la enfermedad ya que personalmente la considero una buena soprano. Siento que fuera así. Ruego me disculpe por el error en mi comentario.
    Un aficionado a la ópera.

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  21. Gracias por vuestras informaciones, Héctor y Aficionado a la ópera.
    Lo que sí están claras, desde luego, son dos cosas: el comportamiento dictatorial que siempre caracteriza a Frau Schmidt y que Opolais fue una estupenda Tatiana que superó con mucho el rendimiento de Mataeva. Cosa que seguro hubiese hecho también Echalaz.

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  22. Buenos, malos o peores, vale la pena que en Valencia se sigan haciendo espectáculos que te hagan acudir al patio de butacas y possteriormente al teclado de tu ordenador. Una gozada leerte. Entre lo de Messi el Cojo Manteca más el precio de los pepinos, la tortura de Mario con la voz de Vratogna y la muerte, por desgracia ficticia, de este último, me ha partido de risa y yo a la risa le doy mucho valor.
    Gracias mil, brillante Atticus.

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  23. De momento, que sigan ofreciendo espectáculos en Les Arts, que ya es mucho dados los tiempos que corren.
    Si son medianamente buenos, mejor, y, si no, pues al menos que Glòria se lo pase bien.
    Un saludo.

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  24. Tienen buen gusto los chicos del diario Levante EMV a la hora de informarse sobre ópera. Que sigan leyendo "El Blog de Atticus".

    Estuve el domingo en Tosca. Por favor, que retiren para siempre esa producción escénica. Sobretodo los WC gigantes del primer acto haciendo de entrada de la iglesia.

    Por supuesto Marcelo canceló a última hora. Yo creo que, en el fondo, hace bien en no salir a competir con Wellber y sus decibelios. Y si es con Dyka al lado, lo entiendo perfectamente. Potente y solvente de voz, pero gélida como ninguna. Su "Vissi d' arte", tan mecánico e inexpresivo, decepciona demasiado. A Vratogna me lo esperaba aún peor. Su Scarpia me resultó vulgar pero no me llegó a molestar tanto como en aquella sarta de gruñidos del Amonasro de hace dos años.

    A mí Wellber me gustó mucho en el tercer acto al completo, con preciosos y regulados contrastes. No así en los dos primeros, desaforado, nervioso e incoherente. Entiendo que desquicie a los músicos. Y creo que Puccini no es de su mundo. Pero abogo por apoyarle después de lo que le han montado los impresentables señoritos y pésimos profesionales de la orquesta de Milán.

    De León posee uno de los materiales más prodigiosos que he escuchado nunca, pero restringido a la zona aguda y en forte. Hay en él cierto derroche de color que utiliza para rellenar maravillosamente las frases amplias. En ese aspecto me recuerda al Domingo de canto pleno. También Gedda, aunque tan distinto, sacaba así su paleta. Aunque lo que es cantar, en mi opinión, De León no canta un pimiento. "Recondita armonia" le viene que ni pintada, pero le pilla algo en frío (¿a quién no?). Da gloria deleitarse en sus "pepinazos" de "La vita mi costasse" o "Vittoria, vittoria", plenos de color, calor, potencia, verdad, juventud y fiato. En "E lucevan le stelle" está pletórico de emoción, pero no de matices canoros. Por mucho que lo intente. Y el "O dolci mani" está pensado, definitivamente, para un cantante de línea fina. El corazón pide bravearle, y yo en el teatro lo hago espontáneamente y con gusto. Pero parémonos y reflexionemos: su canto es sin duda "de brocha gorda", y no creo que mejore, por poseer un material poco dúctil. Ojalá me equivoque. En definitiva: si bien es cierto que en una grabación se pierde buena parte de la magia del metal de su timbre, sin embargo asistir a un buen día de De León -y el domingo lo fue- es gozar plenamente con la pasión de la ópera en vivo, en esencia y en estado puro. Que tenga mucha suerte y que no se equivoque poniéndose "celoso" por lo que otros tenores hayan cantado.

    Ennecus.

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  25. Caramba Ennecus, sensacional crónica. Por favor, espero que se repitan.

    Coincidimos bastante, aunque te encuentro benévolo con Vratogna y Wellber. Para mí también fue mejor su tercer acto que el resto, pero no como para compensar su dirección global que me ha parecido muy desafortunada. Que en la Scala hayan sido más o menos injustos con él (después de lo oído creo que muy injustos tampoco deben haber sido), no debe obstar a que podamos criticarle sin reparos cuando haga las cosas mal.
    Con De León haces un análisis que considero bastante ajustado a la realidad, aunque lo de que "no canta un pimiento" creo que es exagerado (pero vamos, yo precisamente no criticaré a nadie por exagerar). Sin embargo pienso que sí hay motivos para la esperanza respecto a la evolución que pueda experimentar el canto del tenor tinerfeño. Desde su Chenier de Madrid o la Tosca del pasado año hasta este Cavaradossi, creo que sí ha pulido muchas cosas. Lo que sí me da miedo es que su carrera se precipite hacia terrenos que puedan ofrecerle un triunfo a muy corto plazo, pero que lastren definitivamente las innegables facultades que posee y acaben con su voz. Por ejemplo, creo que debería repensarse su Otello por el momento.
    Un abrazo.

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  26. Sí, sí, claro, a eso me refería con lo de "celoso". Su posible "Otello" no me motiva demasiado. En un cantante como Seiffert me parece una gran idea, porque a estas alturas es un auténtico sabio. Pero De León debe explorar otros derroteros.

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  27. Ennecus, si Jorge de león no "canta ni un pimiento", entonces el 99% de los cantantes actuales no es que ni cante, no hablan... :-)
    En cuanto a lo de que su canto es de "brocha gorda"... pues ¡Viva la brocha gorda!
    Jorge de león tiene una de las mejores voces que yo he escuchado jamás, y a poco que cuide su repertorio y pula algunos detalles va a ser uno de los grandes sin ninguna duda.

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  28. Totalmente de acuerdo, anónimo: da auténtico gusto escucharle y ha mejorado muchísimo desde aquella "Bruja" de la temporada inicial de Les Arts. Ojalá siga mejorando, que es lo que esperamos todos.

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  29. Ayer asistí de nuevo a la representación de Tosca "cantada" por Marcelo Alvarez.
    Cuando antes de comenzar la representación anunciaron por megafonía: "el tenor Marcelo Alvarez a pesar de no encontrarse perfectamente de salud cantará el papel de Cavaradossi...", ya me temí lo peor.
    Si no estás perfectamente, ¿para que sales a cantar?...
    Solo digo una cosa: Como se le ocurra presentarse en la Scala a final de mes cantando Tosca como ayer lo hizo en el Palau, se puede liar allí una gorda...

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  30. Lo de Marcelo es preocupante. Primero se dijo que había cancelado las primeras funciones por un problema en los ojos, ahora el problema parece estar en la voz.
    Lo cierto es que se está convirtiendo en un cancelador habitual y cada vez su canto nos convence menos.
    Esperemos que pase la racha antes de que cante en La Scala, porque Wellber ya le habrá dicho cómo se las gastan por allí.

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  31. Normal que todos los comentarios alaben tu crítica si censuras a los que no la compartimos. Dando ejemplo de autocrítica, qué paradójico.

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  32. En este blog no se censura la opinión de nadie, como puedes comprobar en este y anteriores post, siempre que se trate de eso, de dar una opinión.
    Tu comentario se ha borrado por contener insultos y tengo que decirte que es la primera vez que me veo obligado a hacer esto en el blog.
    Puedes participar en cualquier debate y dejar tu opinión, sea la que sea, si eres capaz de hacerlo sin insultar ni amenazar a nadie.

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  33. Reescribiré mi opinión sin insultos ni amenazas de ningún tipo, ni frases que puedan malinterpretarse como tales:
    1. Me parece que eres durísimo con artistas, trascendiendo la mera crítica profesional, tachando de ladridos las voces de algunos cantantes, diciéndo que lo mejor que han podido hacer en la obra es morirse y que es una pena para algunos que estuviese actuando y no se muriese de verdad.

    2. Tus críticas al director también me parecen a todas luces desaforadas, cargadas de una especial inquina. Quizás es porque no te he leido demasiado, igual es práctica habitual: lo desconozco.

    3. Por último insisto en que me parece demasiado fácil criticar el trabajo de ésta gente desde el anonimato, poniéndose una careta y situándote por encima del bien y del mal. Tendrían más valor éstas críticas si su autor se expusiese, si dijera: aquí estoy yo y ésto pienso. De ahí que también te animase a, si tanto dominas la técnica como para ser tan sarcástico, dirigir tu propia obra y exponerte a la crítica ajena, probablemente más misericordiosa que la tuya.
    Espero que no interpretes éste mensaje como injurioso o amenazador, porque no es ésa mi intención.

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  34. Mis crónicas no pretenden ser duras ni blandas. Son única y exclusivamente mi opinión personal manifestada en mi blog. Nunca he pretendido que esta opinión sea considerada como la verdad absoluta, ni como la crítica oficial. No pretendo tener razón, ni ser más listo que nadie. Es simplemente la opinión de un aficionado expresada en un espacio que me pertenece, donde escribo de lo que me gusta, en el que no cobro de nadie por hacerlo, no tengo publicidad y no obtengo nada a cambio, con lo cual entiendo que podré escribir lo que me parezca oportuno, que, repito, no pretende ser más que mi particular opinión, tan válida o criticable como la de cualquier otro aficionado. Por eso tampoco entiendo que se le pueda dar tanta importancia a lo que yo pueda manifestar.
    Lamento que no hayan sido de tu agrado mis comentarios, y algunos de ellos veo que no los has entendido en absoluto, con lo cual entiendo que me debo haber expresado fatal, pero no pretendo ni agradar ni fastidiar a nadie, únicamente dar mi opinión y compartirla con quien pase por aquí y desee dejar la suya e intercambiar puntos de vista.
    Respecto al anonimato, tienes razón, escribo bajo el nombre de Atticus, no como tú que por lo que veo utilizas tu auténtico nombre.
    En cualquier caso, gracias por tu visita y por el tono de tu último comentario.

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  35. Vicent Martí15/4/12 21:01

    Sólo le diría al anónimo que la crítica que ha hecho Atticus, a mí me parece incluso benévola con Wellber y Vratogna.
    Si quiere saber lo que es ser duro con los cantantes, que se pase por los foros operísticos más populares.
    Su mensaje demuestra una carencia absoluta de sentido del humor y de saber identificar lo que pueda ser un comentario irónico.
    Si la carrera de los cantantes se puede ver afectada por lo que se comente en un blog, poco dice eso de la valía de esos cantantes.
    En fin, no sigo, no merece la pena.
    Atticus, no hagas ni caso.

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  36. Estimado Atticus:
    He escrito muchas veces en tu blog comentando, desde mi modesto punto de vista, mis opiniones y siempre me he sentido bien tratado hayamos coincidido o no en lo escrito. No entiendo al anónimo comunicante que te critica. Respeto su opinión, tan respetable y válida como cualquier otra, pero no la comparto. Simplemente quería hacerlo constar como participante más o menos habitual en los comentarios de este blog. Gracias Atticus por tu blog, gracias por dejarme escribir en él y ánimo. Los diferentes puntos de vista enriquecen siempre.
    Un fuerte abrazo.
    Un aficionado a la ópera.

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