martes, 19 de febrero de 2013

GALINA VISHNEVSKAYA. TEMPERAMENTO RUSO


El pasado mes de diciembre falleció en Moscú la soprano rusa Galina Vishnevskaya (1926-2012). Quienes sigáis este blog y me conozcáis, sabréis que es una cantante por la que siento especial devoción. Su canto y su fuerza expresiva siempre me han cautivado y considero que en el repertorio ruso hay pocas voces que le hagan sombra.

Mi admiración por ella aumentó todavía más cuando conocí un poco las vicisitudes de su vida personal. Y es que la vida de Vishnevskaya estuvo plagada de emociones, penurias y desgracias a las que la fama posiblemente jamás consiguiese dar suficiente compensación.

Nacida en 1926, la guerra y la pobreza estuvieron presentes en sus años de juventud y la marcaron para siempre. Sus padres la abandonaron siendo niña y fue a vivir con su abuela paterna, quien murió como consecuencia de las quemaduras sufridas en un incendio cuando, al quedarse dormida junto a la estufa, sus ropas se prendieron. Galina contaba apenas 15 años, quedando entonces sola y sumida en la pobreza.

En 1943, en pleno sitio alemán de su ciudad natal de Leningrado (actual San Petersburgo) entró a estudiar en el Conservatorio y un año después contrajo matrimonio con el joven oficial de Marina Georgi Vishnevsky, de quien tomaría para siempre el apellido. La unión apenas duró unos meses debido al alcoholismo de él y a su férrea oposición a que Galina pudiese embarcarse de lleno en una carrera musical o artística.

Tras la liberación de Leningrado y ser condecorada con una medalla por participar activamente en la defensa de la ciudad, se unió a una pequeña compañía de opereta que dirigía Mark Ilich Rubin, 22 años mayor que ella, con quien además de trabajar acabaría casándose. Poco tiempo después tuvieron un hijo, pero el pequeño contrajo una infección y falleció a los dos meses de edad, contando en sus memorias Vishnevskaya que ella y su marido fabricaron el ataúd con unas tablas que forraron con tela blanca y enterraron a su hijo abriendo una fosa con sus propias manos luchando contra la dura tierra congelada del cementerio.

Su preparación técnica y vocal junto a Vera Nikolayevna Garina fue decisiva para lograr un cierto equilibrio e ilusión en su vida personal y sobre todo para el futuro éxito de su carrera, aunque a punto estuvo también ésta de frustrarse para siempre cuando a Vishnevskaya le detectaron una tuberculosis que exigía la extirpación de parte de un pulmón. Sin embargo, pudo vencer la enfermedad sin necesidad de intervención quirúrgica gracias a una fuerte medicación que obtuvo en el mercado negro, sin que, afortunadamente, sus capacidades vocales resultasen afectadas.

En 1952 participó en un concurso de canto organizado por el Teatro Bolshoi para la captación de jóvenes voces, logrando alzarse con la victoria, siendo admitida al año siguiente para formar parte de la compañía del Bolshoi, donde permanecería hasta 1974. En cuanto empezó a despuntar, la KGB contactó con ella para intentar utilizarla como confidente y descubrir a los presuntos enemigos del régimen infiltrados en el mundo artístico, aunque progresivamente pudo irse desvinculando de esas prácticas. Lo que no pudo evitar fue el acoso del entonces jefe del estado soviético, Nikolái Bulganin, quien cortejó a la cantante con inusitada insistencia. Pero él no sería el elegido para convertirse en su nueva pareja.

En 1955 su matrimonio con Mark Rubin pasaba por horas bajas y fue entonces cuando conoció al violonchelista Mstislav Rostropóvich, surgiendo inmediatamente una atracción mutua que les llevó a casarse ese mismo año. A partir de ese instante la vida personal de Vishnevskaya dio un definitivo giro positivo y al fin encontró la felicidad al lado de un hombre junto al que tuvo dos hijas y que fue su pareja hasta el fallecimiento de Rostropóvich, en 2007, tras 52 años de matrimonio.

En lo profesional, la carrera de Galina estaba en auge. Era ya plenamente reconocida en su país y comenzaba a triunfar paseando su arte por todo el mundo, pese a las restricciones que el gobierno soviético tenía para las salidas de los artistas nacionales fuera de sus fronteras, salvo que fuesen de la relevancia de Vishnevskaya o Rostropóvich que eran en aquel momento una inmejorable propaganda de la excelencia de la cultura soviética.

Sin embargo, a comienzos de los años 70 las cosas volvieron a torcerse cuando Rostropóvich alojó en su casa de campo al disidente político Aleksandr Solzhenitsyn y le defendió públicamente. Las autoridades prohibieron a la pareja actuar fuera de la URSS, silenciaron el trabajo de ambos y Rostropóvich fue incluso expulsado del Bolshoi. En 1974 ya no soportaron más esa situación y tomaron la difícil decisión de abandonar el país junto a sus hijas y residir en el extranjero. Así lo hicieron y, tras su exilio, les sería revocada la nacionalidad soviética como represalia.

En 1990, ya con Gorbachov en el poder, se acordó restaurarles su condición de ciudadanos soviéticos, gesto al que correspondieron Mstislav y Galina en 1991 regresando de nuevo a vivir en su país. Actualmente, los cuerpos de ambos reposan para siempre en el cementerio moscovita de Novodevichy.

Bueno, pues hasta aquí la pequeña reseña que quería hacer de la vida de Galina Vishnevskaya, una mujer de la que, además de su bellísima voz, he admirado su capacidad de lucha y superación, su arrolladora personalidad, la firmeza de su carácter y su fuerza para hacer frente a las adversidades con optimismo, viendo siempre la cara positiva de las cosas. Por eso era capaz de declarar que, a pesar de todo, había tenido en la vida lo mejor que puede existir: “el mejor teatro, el mejor esposo y los mejores directores de orquesta y de escena”.

Aunque hoy no me he centrado en la parte musical, no quisiera acabar sin dejaros la oportunidad de escuchar a Vishnevskaya. Se trata además de una pequeña joya a la que de momento se puede acceder gracias a los amigos de Youtube. Es un recital íntegro dedicado a canciones de Tchaikovsky que la cantante ofreció en el Gran Salón del Conservatorio de Moscú en 1964 acompañada al piano por su esposo Mstislav Rostropóvich. Dura poco más de una hora y es toda una gozada.




domingo, 10 de febrero de 2013

PLÁCIDO DOMINGO: LA ÓPERA DE LA VIDA


El pasado viernes 8 de febrero tuvo lugar en el Palau de les Arts de Valencia la última función de la ópera de Giuseppe Verdi “I due Foscari” que se ha venido representando con el protagonismo absoluto de Plácido Domingo en el rol de Francesco Foscari, y de cuyo estreno ya hablé anteriormente aquí.

Ayer sábado, el programa televisivo “Informe Semanal” dedicó al cantante madrileño uno de sus reportajes, con motivo de ese nuevo papel asumido que constituye el 140 de su larga y fructífera carrera. Es una entrevista breve, pero que me ha parecido de gran interés y por eso he decidido traerla hoy al blog.

Entre otras cosas, habla sobre ese nuevo trabajo, sobre la frenética actividad que ha llevado estos días, sobre la acústica del teatro valenciano e incluso deja caer que ya tiene apalabrada otra actuación en Les Arts, aunque por supuesto no desvela cuál es. ¿Quizás una reposición del “Simón Boccanegra” que pudo verse en 2007, con él esta vez como protagonista?

domingo, 3 de febrero de 2013

AVANCE DEL VI FESTIVAL DEL MEDITERRANI

Carlos Álvarez y Aleksandrs Antonenko, como Iago y Otello - Salzburg 2008

Parece que ya se van despejando las dudas en cuanto a los espectáculos previstos para el VI Festival del Mediterrani, a celebrar en el Palau de les Arts de Valencia el próximo mes de junio.

Desde que la Intendente Helga Schmidt hiciese el anuncio del contenido de la temporada operística valenciana para este ejercicio 2012-2013, ya se adelantó la inclusión de la ópera “Otello” de Giuseppe Verdi, en el Festival del Mediterrani, señalándose entonces al tenor Jorge de León como protagonista de la misma. El cantante tinerfeño, pese a la insistencia de Les Arts, decidió finalmente declinar el ofrecimiento, considerando, creo que con muy buen criterio, que todavía es pronto para afrontar un papel de la envergadura del moro verdiano. Desde ese instante, en la página web de Les Arts no se ha dado referencia alguna sobre los repartos de este “Otello”, surgiendo múltiples especulaciones acerca del cantante que podría encarnar al protagonista.

Pues bien, por fin la web de Les Arts ofrece nueva información y, aunque sabemos que los repartos anunciados en el teatro valenciano pueden cambiar veinte veces antes del estreno, a fecha de hoy se anuncia que será el tenor letón Aleksandrs Antonenko el encargado de asumir el rol protagonista, acompañado por el barítono malagueño Carlos Álvarez como Iago y la soprano María Agresta, a quien pudimos disfrutar la pasada temporada como la Leonora de “Il Trovatore”, como Desdémona.

Desde luego no parece una mala perspectiva, ni mucho menos. Antonenko es actualmente uno de los cantantes que puede afrontar con más garantías este complicado papel y, pese a su juventud, lo ha representado ya en los principales teatros operísticos internacionales.

Otra muy buena noticia es que Carlos Álvarez se encuentre con fuerzas para interpretar un personaje como Iago, papel que ya ha cantado anteriormente en otras ocasiones, una de ellas precisamente junto a Antonenko y Marina Popvlaskaya en Salzburgo en 2008, dirigidos por Riccardo Muti, existiendo una grabación comercializada en DVD.

Sorprende un tanto el anuncio en el cartel de María Agresta tras haber caído de la reciente “Bohème”, parece que por desavenencias con Les Arts al no haber cobrado las cantidades correspondientes a “Il Trovatore” del año pasado, aunque puede ser una estupenda Desdémona.

Ya digo que si se confirman estos intérpretes, la cosa pinta bien, aunque vuelvo a insistir en que los repartos de Les Arts varían más que la prima de riesgo.

Sobre lo que todavía no aparece referencia alguna es acerca de la producción que se ofrecerá. No sabemos si se tratará de una nueva producción o se alquilará alguna externa. Al menos confiemos en que no se opte por una versión en concierto.

Por otra parte, también se ha incluido en la programación del Festival un concierto en el que Zubin Mehta dirigirá a la Orquesta de la Comunitat Valenciana en la interpretación de dos obras de Johannes Brahms, la Obertura trágica y la Sinfonía nº 4, y en el extremadamente complicado Concierto para Violín de Arnold Schönberg, donde actuará como solista Michael Barenboim, hijo del director Daniel Barenboim.

Así están de momento las cosas, seguiremos atentos a las informaciones que se puedan ir produciendo. Os dejo con un video de Aleksandrs Antonenko como Otello, en el “Dio me potevi” perteneciente a la producción de Salzburgo de 2008:


video de rexeterna